Este es el sencillo truco para evitar el dolor lumbar en el trabajo: "No hay una postura correcta"
- El fisioterapeuta Fran Ortega hace hincapié en la importancia de incluir 'snacks' de movimiento en la rutina para reducir los problemas de espalda.
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'Ya no sé cómo ponerme'. Esta es una de las frases más repetidas entre las personas que trabajan en una oficina. Las largas jornadas sentado frente a la pantalla de un ordenador y la falta de movimiento, acaban provocando dolores musculares y otros problemas de salud.
Según datos del Servicio de Prevención de Riesgos Laborales (ASPY), el dolor de espalda es el causante del 50% de las bajas laborales que se producen en España. En el 86% de los casos, las condiciones laborales agravan el problema. Las personas mayores de 55 años, y en especial las mujeres, son más propensas a sufrirlo.
El dolor lumbar provocado por una mala higiene postural suele ser persistente y, a menudo, los pequeños cambios de postura no parecen aliviarlo. El fisioterapeuta Fran Ortega, que tiene su clínica en Elche, ofrece algunos consejos prácticos para combatir este malestar y prevenirlo.
"El dolor lumbar es muy característico. Empiezas a moverte, cambias de posición y nada te alivia. Sin embargo, la causa principal no es una postura específica, sino el hecho de mantener cualquier postura durante más de una hora", explica Ortega.
Según el experto, la clave está en mantener una buena condición física, lo que permitirá al cuerpo soportar mayores cargas.
Snacks de movimiento
Ortega propone una solución sencilla y eficaz: los snacks de movimiento. Se trata de pequeños ejercicios, que se pueden realizar cada hora en la oficina para evitar el dolor lumbar y activar la musculatura.
"Lo mejor son los snacks de movimiento". Ortega propone levantarse de la silla a cada hora para realizar por ejemplo 10 sentadillas. Darse un paseo de camino al baño y realizar un trabajo de activación interescapular, movilidad de cuello o el llamado 'doble mentón' para relajar la columna cervical.
También propone ir a la oficina acompañado de una banda elástica, "algo que se puede encontrar fácilmente", y realizar pequeños estiramientos.
Estos microentrenamientos tienen varios beneficios: "Activas la musculatura, mejoras la circulación, y además liberas opioides endógenos, lo que ayuda a reducir las molestias. La clave es repetir este proceso cada hora", afirma Ortega.
Mitos sobre la postura
Uno de los errores más comunes es pensar que la postura perfecta o los artilugios ergonómicos caros pueden solucionar el problema. Según Ortega, esta idea está desfasada: "Cualquier postura mantenida durante más de una hora te va a provocar molestias".
Y añade: "Cualquier accesorio que compres tendrá menos efecto que simplemente caminar y moverte".
En resumen, la mejor manera de prevenir el dolor lumbar crónico es mantenerse activo. Los snacks de movimiento no solo ayudan a combatir el dolor, sino que también mejoran la salud en general.
Así que, si trabajas delante del ordenador, ya sea desde casa o en la oficina, recuerda levantarte cada hora y hacer unos minutos de ejercicio ligero para cuidar tu cuerpo a largo plazo.
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Dolor crónico
Según la web especializada 'Medline Plus', el dolor es una señal del sistema nervioso de que algo puede estar mal. Se traduce como una sensación desagradable, que se puede manifestar en forma de un pinchazo, hormigueo, picadura, ardor o molestia.
Hay dos tipos de dolor. El dolor agudo, que nos avisa cuando hay una lesión. Por otro lado, está el dolor crónico, que puede durar semanas, meses o incluso años. La causa original puede haber sido una lesión o infección. Sin embargo, no indica que haya una lesión actual.
El fisioterapeuta Fran Ortega tranquiliza a los pacientes indicando que el dolor crónico no tiene porqué ser para toda la vida. "Es un dolor que dura más de de lo que se le atribuye a la regeneración de un tejido". Añade, que en estos casos puede que el sistema nervioso esté perpetuando ese dolor. "Sigue mandando señales de dolor aunque el tejido se haya recuperado".
"El dolor en sí es el problema. Tu propio sistema nervioso está perpetuando esa señal. Tu cerebro aprende sobre ese dolor, es como una memoria de ese dolor. No hay una relación tan clara de un tejido dañado con el dolor crónico", insiste Ortega.
Educar al paciente
Por ello, la forma de tratarlo debe ser diferente. El especialista, quien también trabaja con el deportista Ilia Topuria, explica que la clave para tratar el dolor crónico es educar al paciente.
El primer paso debe ser acudir al profesional adecuado que haga un buen diagnóstico. Después, también es importante enseñar al paciente las herramientas adecuadas para el automanejo del dolor. Ortega afirma que el dolor crónico se debe trabajar tanto desde la parte física como la parte psicológica.