José Manuel, de ayudar en la riada de Biescas a la DANA en Valencia: "Es muy parecido pero multiplicado a lo grande"
- Cruz Roja Aragón se ha desplazado hasta Valencia con un equipo de diez personas para realizar tareas de limpieza y llevar alimentos y medicamentos.
- Más información aquí: Aragón ayudará a Valencia con la retirada de animales muertos y la limpieza de colegios afectados por la DANA
Muchos de los voluntarios aragoneses destinados en Valencia están reviviendo la riada del campin de Las Nieves en Biesca. Han pasado 28 años desde que una crecida extraordinaria y súbita del barranco de Arás arrasara el emplazamiento y dejara 87 víctimas mortales.
José Manuel Miranda, responsable de los equipos de respuestas e intervención de Cruz Roja Aragón destinado en Valencia, ha participado en las operaciones de ayuda de ambas tragedias.
Ahora, destinado en la Comunidad Valenciana, ve semejanzas entre lo ocurrido: "Ves coches en posiciones similares, uno encima del otro, cubiertos de barro, torres de luz destrozadas", explica Miranda. "Es parecido, pero multiplicado", resalta.
Aunque la gran magnitud de la DANA en Valencia ha hecho que los puntos afectados se dispersen. "En Biescas era una zona muy concreta, aquí son muchos sitios", explica. De aquella trágica vivencia, destaca que ha podido aplicar lecciones que aprendieron trabajando en el campin: "En ambos casos trabajabas con mucho barro y sabes que lo tienes que limpiar cuando está húmedo, en que se seque va a ser casi imposible", reflexiona.
La misión en Valencia le ha pillado con una mayor experiencia en el terreno. Sin embargo, para él la riada de Las Nieves significó su primera gran emergencia de estos niveles. "La primera imagen de ambos casos impacta", resalta Miranda, quien lleva más de 25 años trabajando en la entidad.
Labor de Cruz Roja
Miranda lleva desde este martes con un equipo de emergencias de Cruz Roja formado por diez personas en Sedaví. Sus tareas principales están consistiendo en llevar alimentos y medicamentos a personas mayores que tienen dificultad o imposibilidad para salir de sus viviendas.
Además, también conforman una red de apoyo de limpieza en calles y domicilios y se encuentran trabajando junto a los bomberos del operativo de Aragón liderado por el 112. "Parte del equipo está dando soporte a los bomberos ante un riesgo de derrumbe de una vivienda en Catarroja", detalla Miranda. De esta manera, se ocuparían del posible desalojo de las familias y de tareas de coordinación con los equipos de bomberos. Además de ayuda sanitaria si fuese necesario.
Los voluntarios aragoneses apoyando a las PERSONAS damnificadas en Sedaví. Hoy están realizando tareas de reparto de agua, alimentos, limpieza y desescombro. Orgullosos de todos vosotros y de los que muestran su disponibilidad para colaborar ante los efectos de la #DANA pic.twitter.com/zAfuymlXT5
— @CruzRojaAragon (@CruzRojaAragon) November 6, 2024
Aunque su punto de referencia de trabajo es Sedaví, los miembros de Cruz Roja de Zaragoza han estado realizando tareas en municipios altamente dañados por la DANA como Alfafar, Albal o Catarroja. Y en todos ellos la impresión es la misma: "Es una zona de guerra, es un caos impresionante", enfatiza Miranda.
Sin embargo, destaca que en todo momento los vecinos de Valencia se mantienen con buen ánimo y agradecidos: "Vas a darles materiales de primera necesidad y son ellos mismos los que te ofrecen agua, café o lo que necesites", explica. "Están mostrando un gran poder de resiliencia", recalca.
Mucho de ese ánimo, asegura que se debe del apoyo de la gente que acude a ayudar. "Hay muchos voluntarios, te encuentras coches en las laderas de gente que se ha desplazado y mucha gente andando que no duda en acudir a ayudar en las tareas de limpieza", explica Miranda.
Apoyo psicológico
El exhausto trabajo que realizan durante horas y la exposición a una tragedia de tal calibre como la que se ha registrado en Valencia mina psicológicamente. Desde Cruz Roja han puesto a disposición del equipo apoyo de tres psicólogos. Todas tardes tienen conversaciones con ellos para conocer cómo se encuentran. "Al final es una escena muy difícil de asumir", expresa Miranda.
Por el momento, no se han destinado equipos psicosociales de Aragón a Valencia, pero no creen que tarden. "En unos cuatro o cinco días se espera que nos den el visto bueno y que se incorporen", explica. "Significa una ayuda importante que hace mucha falta entre los afectados", recalca Miranda.
De esta forma, el equipo que ahora se encuentra en tareas de ayuda en Valencia será relevado el día 9 de noviembre por otro equipo del mismo número de personas. Así hasta que haga falta.