Marta y Pilar, psicólogas aragonesas desplazadas en Catarroja

Marta y Pilar, psicólogas aragonesas desplazadas en Catarroja E. E.

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Psicólogas aragonesas, la calma entre el caos causado por la DANA en Valencia: "Emociona ver el apoyo que se dan"

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Van calle a calle con los brazos abiertos para dar apoyo a quien se le necesite. Marta Romance y Pilar Serrano, del Grupo de Intervención psicológica en emergencias y catástrofes del Colegio Profesional de Psicología de Aragón (COPPA), han pasado 48 horas en Catarroja dedicadas a dar ayuda psicológica a aquellos que han visto truncada su vida en cuestión de minutos. 

"Es una imagen muy dura, vas paseando por las calles hablando con las personas ofreciéndoles un espacio seguro para que puedan expresar sus necesidades", expresa Marta Romance, quien ha estado en Catarroja desde el martes hasta el jueves por la tarde.

Su trabajo se centra en cubrir necesidades sociales, medicación y enseñar a gestionar lo ocurrido. Y entre el lodo y las labores de limpieza, señala que siempre hay lugar para muestras de cariño: "La gente pide mucho contacto físico, muchos abrazos", explica Marta. "Hemos tenido muy buena acogida, en general, ante el apoyo social se muestran muy agradecidos", detalla esta psicóloga.

Una vez finalizado su ayuda en Catarroja destaca que la catástrofe ha levantado una reacción generalizada en la población: "Se encuentran modo trabajo, es una respuesta común para seguir adelante y recuperar la normalidad", explica Marta. Ante mirar por el futuro, esta psicóloga señala que es momento de "ir día a día, paso a paso". 

De los más mayores a los pequeños

Durante su recorrido, no se han olvidado de aquellas personas mayores que se encuentran aisladas. Si se les comunicaba que había alguna persona de mayor edad que podía tener necesidades no han dudado en acudir. "Hay que ir a visitarlas, ver cómo están, si tienen ese apoyo externo de familias o voluntarios para que estén presentes", recalca Marta. Además, en estos casos hay que prestar atención por si necesitan ciertos medicamentos para poder facilitárselos. 

Y entre tanto caos, los que han mostrado una fuerza superior son los más pequeños: "Los niños sorprenden mucho, son muy resilientes y están afrontando con fuerza lo que ocurre", explica esta psicóloga.

Aunque destaca que en el caso de Catarroja se ven menos niños porque las familias han intentado llevarlos con familiares a otros pueblos. Sin embargo, para aquellos que siguen se están comenzando a habilitar pequeños colegios para darles normalidad. "Lo importante es hablar con ellos, que cuenten lo que ven, darles atención", detalla. 

La imagen que más ha impactado a esta psicóloga desplazada en Catarroja ha sido la unión de los más jóvenes. "Me emociona mucho ver a los voluntarios que pasan con escobas yendo a dar lo que podían dar", resalta Marta. "Hay mucha fraternidad entre ellos, es lo mejor que puedes ver en estos momentos, es muy bonita su solidaridad", expresa. 

Tanto Marta como Pilar ya han vuelto tras ser relevadas por otras dos compañeras del Grupo de Intervención psicológica en emergencias y catástrofes del Colegio Profesional de Psicología de Aragón (COPPA). Y afirma que no había estado en ninguna catástrofe de estas magnitudes como la ocurrido en Valencia.