La vacunación contra la gripe pincha entre los menores de 55 años en Aragón: "Hay poca conciencia"

La vacunación contra la gripe ha pinchado este año entre los menores de 55 años en Aragón. El porcentaje de mayores de 80 inmunizados alcanza el 71%, pero en la franja de 80 a 60, el dato cae hasta el 43%. Según confirman los profesionales del sector, las cifras "van descendiendo conforme se bajan peldaños" tanto en la población general como entre los trabajadores sanitarios. Y eso que desde el Gobierno de Aragón se han impulsado, incluso, jornadas de vacunación sin cita previa.

"Hay poca conciencia", reconoce el presidente de Fasamet y del Sindicato de Médicos de Atención Primaria de Aragón, Leandro Catalán.

Entre los mayores de 80, los porcentajes más altos se dan en el sector de Huesca, donde llegan al 79%. En el caso de los niños de 6 meses a 5 años, la media es del 37%, destacando los sectores I y II de Zaragoza -los que tienen como referencia el Royo Villanova y el Miguel Servet- con un 42%.

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Los sanitarios confían en que el aumento de casos anime a la población a pedir cita, aunque temen que ya sea "demasiado tarde", dado que "se necesita un tiempo para generar anticuerpos". "Se está vacunando menos gente que otros años pese a haber más facilidades. Lo vemos, sobre todo, en la gente joven. Ha habido personas que nos han dicho que 'no' porque no querían ponerse la vacuna contra la covid-19, pero son totalmente independientes", recalca Jessica Fessenden, responsable de Sanidad de CSIF en Aragón.

El inicio del pico de la gripe ha coincidido, un año más, con una época marcada por el cierre de camas y las vacaciones del personal. Esto se ha notado, sobre todo, los días posteriores a la Nochevieja, aunque poco a poco se vuelve a la normalidad. "Los que trabajan tienen que asumir más carga asistencial doblando consultas y haciendo más horas de atención continuada. Los pasillos están bastante llenos", admite Catalán, que espera que la situación no termine desbordándose. "En las próximas semanas habrá más contagios, pero también gente que se curará. Confiamos en que se compensen unos con otros", añade.

Los primeros casos se vieron ya en diciembre, coincidiendo con la semana de la Navidad. En estos últimos días, el aumento de la incidencia ha hecho que se venga observando un mayor uso de las mascarillas. Antes, incluso, de que el Gobierno de Aragón lanzase la recomendación a trabajadores, pacientes y usuarios de centros de salud, hospitales y residencias. Tras el aviso, el número de cubrebocas ha ido a más, especialmente entre la población de riesgo y de edad más avanzada, según cuenta Catalán.

Situaciones como las que se están viviendo estos primeros días de 2025, recuerda, ocurrían ya antes de la pandemia. "Todos los eneros eran complicados, solo que entonces teníamos más sustitutos", razona. Esto hace que puedan descartarse problemas para atender al volumen de pacientes que se prevé de cara a la segunda quincena.

Con la vacunación, el mayor problema es que los grupos de riesgo "tampoco se han inmunizado en un porcentaje muy elevado". "Ocurre lo mismo con el personal sanitario, con la gente de 25 a 50 años y con los niños de 6 a 12. Hay que concienciarse un poco más, hacen falta más campañas. Es un fallo de educación sanitaria por parte de la población", opina el presidente de Fasamet.