El PSOE ha pedido amparo este jueves a la Justicia de Aragón, Concepción Gimeno, para que la alcaldesa de Zaragoza, Natalia Chueca, frene los "discursos de odio" en el Ayuntamiento.

Su portavoz, Lola Ranera, cree necesario modificar el reglamento orgánico municipal para "garantizar la calidad democrática", que ha sufrido, en su opinión, "una grave deriva desde la entrada de Vox a las instituciones".

Para Ranera, estos discursos generan "violencia institucional". Esto le ha llevado a registrar un nuevo escrito en el Justiciazgo en compañía del portavoz adjunto, Alfonso Gómez, y del concejal Paco Galán. Su objetivo es que se desarrolle "un procedimiento de control de la legalidad y constitucionalidad de las iniciativas del pleno antes de incluirlas en el orden del día para evitar debates que se podrían tipificar como delitos de odio".

Como ejemplo ha puesto la situación vivida en el último pleno en el marco de una moción sobre la inmigración o las declaraciones "de una entidad como Red Madre enmarcando a los inmigrantes en temas delincuencia, refiriéndose a ellos como 'quinquis y pandilleros".

Para la portavoz, la libertad de expresión no puede utilizarse "para amparar discursos de odio". “Es imprescindible que Zaragoza siga siendo lo que ha sido, una ciudad en la que nos sentimos orgullos de la igualdad y de la libertad y de cuidar a los más vulnerables. Este año celebramos el 25 aniversario de Zaragoza como sitio emblemático de la cultura de la paz por la Unesco. Históricamente ha sido una ciudad integradora, acogedora y que ha cuidado al que más lo necesita. Debemos seguir siendo así”, ha manifestado.

Esta es la segunda vez que el PSOE recurre a la Justicia de Aragón esta corporación. La primera fue por la polémica vivida por los dobles turnos en el pleno municipal. En el anterior mandato, el partido utilizó esta misma vía por otra cuestión relativa a las ordenanzas.