Zaragoza tendrá listo en un año su plan de movilidad para el Mundial: estos son los deberes más inmediatos de la FIFA

Zaragoza tendrá en un año su plan de movilidad para el Mundial 2030, una estrategia que permitirá reforzar las conexiones existentes con La Romareda y puntos críticos como el aeropuerto o la estación del AVE. El objetivo no es otro que soportar con garantías el pico de visitantes que se acercarán a la capital para ver los hasta cinco partidos que se disputarán en la nueva Romareda.

Hasta ahora, la construcción del nuevo estadio ha copado prácticamente todos los titulares, pero para convertirse en uno de los epicentros de la cita mundialista -que moverá más de 350 millones de euros y podría crear hasta 3.500 puestos de trabajo en la capital-, la ciudad necesitará cumplir una exigente 'lista de deberes' que asegure la correcta planificación y organización de todos y cada uno de los factores que rodean al evento.

El Consistorio lleva tiempo trabajando, pero es ahora, una vez se ha confirmado oficialmente que Zaragoza será subsede, cuando los plazos han comenzado a correr. Lo más inmediato -la fecha tope eran tres meses- ha sido nombrar a un funcionario "debidamente cualificado y con experiencia" para ser responsable de la coordinación general de todas las responsabilidades y obligaciones de la ciudad.

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Según confirman desde el Ayuntamiento, este paso "ya se ha dado". Se trata de un alto funcionario de la casa que, junto a Víctor Serrano y a otro responsable, "coordinarán toda la operativa para cumplir el calendario de hitos estipulados".

El Consistorio ha puesto a trabajar al equipo que ya preparó la candidatura de Zaragoza como Ciudad Europea del Deporte. Colgará del área que lidera Ángel Lorén, aunque actuará "de forma transversal", ya que la planificación abarca a departamentos tan importantes como Movilidad, Urbanismo o Seguridad Vial.

Antes de junio de 2025, el Ayuntamiento también deberá tener un plan general del proyecto que recoja hitos clave, presupuesto, organigrama y los planes de personal propuestos. Se trata de un documento "fundamental", según recalcan desde la plaza del Pilar, en el que se habrá de trabajar junto a la Federación Española de Fútbol (RFEF).

También con este plazo, el Consistorio deberá proporcionar o garantizar el suministro de suficiente espacio de oficina o instalaciones ya equipadas a la organización. Uno de los hitos más importantes llegará en 2026, cuando se tendrá que presentar la estrategia de transporte para la movilidad general de los aficionados y otros grupos, así como la garantía de aplicación de todas las leyes especiales municipales.

Aunque la estrategia está todavía en fase de elaboración, se espera que los nuevos circulares que entrarán en servicio en 2025 tengan un papel fundamental, ya que mejorarán la conexión con la estación de Delicias. Para 2030 ya habrá entrado en vigor la reivindicada reordenación de líneas, aunque -debido al volumen de personas que moverá el Mundial- previsiblemente tendrán que habilitarse lanzaderas y refuerzos especiales de bus y tranvía como ocurre, por ejemplo, para grandes ocasiones como las Fiestas del Pilar.

Esos días habrá numerosos puntos de interés, desde la estación y el aeropuerto hasta el propio estadio o las 'fan zones' que se habilitarán en espacios como el Parque Grande o la plaza del Pilar, por lo que se espera un despliegue sin precedentes durante esas semanas de junio y julio de 2030.

Será en 2027 cuando Zaragoza tendrá que terminar de definir los espacios potenciales para el llamado FIFA Fan Festival y designar a un equipo con experiencia en organización de eventos para ayudar a la Federación Internacional, hito que incluye la presentación de un plan "detallado e integral" sobre la planificación del Consistorio.

Pese a que el horizonte se antoja, por ahora, lejano, el Ayuntamiento tendrá que trabajar en múltiples frentes en estos seis años. Uno de ellos, la seguridad y la regulación del tráfico. Ha de tenerse en cuenta que el propio entorno de La Romareda será muy diferente al que se conoce en la actualidad, ya que el futuro campo estará rodeado por una gran plaza que transformará por completo el entorno del paseo de Isabel la Católica.