Eda y Serkan acaban ejerciendo de canguros para sus clientes, una labor que comenzó como un proyecto de trabajo. Al arquitecto no le gusta dicho cometido, pero Eda tratará de ser la niñera perfecta. Además, la cercanía al bebé y el malestar que siente Eda, hace que salten las alarmas por un posible embarazo.
Por otra parte, Aydan está encantada con el apoyo incondicional que le brinda Eda, de quien recibirá una sorpresa inesperada.