Drag Race España aterriza este domingo en ATRESplayer PREMIUM. La versión española del exitoso formato internacional Rupaul's Drag Race permitirá a los espectadores conocer mejor el movimiento drag de nuestro país de la mano de diez reinas que serán guiadas por Supremme De Luxe en esta aventura.
Entre el jurado encargado de valorar la evolución de las racers estarán Javier Calvo y Javier Ambrossi, que tras el éxito de Veneno en la plataforma de pago de Atresmedia se suman a este formato para estrenarse como jueces. BLUPER ha conversado con Los Javis, que nos adelantan algunos detalles de Drag Race y confiesan lo que ha supuesto el programa para ellos a nivel profesional y, sobre todo, personal.
¿Qué vamos a ver en Drag Race España?
Calvo: Hay petardeo y fantasía, pero muchísimo más. Hay emoción, identidad, expresión artística y personal. Es un formato que disfrutamos muchísimo como directores y actores, porque hay muchas pruebas de interpretación, de baile, musicales... Creo que es un formato en el que hemos podido poner en práctica todo lo que hemos aprendido estos años.
Ambrossi: Además es la primera vez que hacemos de jurado, siempre que me ofrecen algo que no he hecho me animo. Es una faceta nueva que la gente va a ver, el futuro de las concursantes depende de lo que opinemos y de lo que votemos. Nos lo hemos tomado con otra perspectiva y está en nuestro interés enseñarle al público otra cara nueva.
Antes de que Drag Race aterrizara en España vimos a RuPaul o Michelle Visage promocionar Veneno en redes. ¿Habéis tenido algo que ver en la llegada del formato Drag Race a nuestro país?
A.: Nosotros tuvimos una reunión hace tiempo, cuando estábamos rodando Veneno, nos preguntaron "si compramos el formato, ¿estaríais?", dijimos que sí y aquí estamos. No sé hasta qué punto hemos tenido que ver, pero el fenómeno Veneno sí ha tenido que ver en demostrar que lo LGTB no es nicho, puede ser un fenómeno mundial. Eso, unido a lo bien que nos llevamos con la gente de la plataforma, me gusta pensar que ha podido animar a Atresmedia y a muchos otros canales y plataformas a apostar por el contenido LGTB.
¿Vais a sacar vuestro lado más duro como jueces del programa?
C.: No hace falta ser duro para ser jurado. Hay gente que lo es porque va en su personalidad. Nosotros como directores y como profesores de OT siempre hemos creído que el refuerzo positivo es lo mejor para una artista. Uno saca lo mejor de sí mismo cuanto más libre es. Nosotros hemos dado nuestra opinión siempre desde el cariño y desde la admiración.
A.: Lo hemos mezclado con momentos de asertividad, no de dureza. Estamos en un concurso en el que vemos cosas que están bien, otras que están menos bien, cosas que pides y no se hacen... Hay que mezclar el refuerzo positivo con la asertividad y creo que hemos encontrado un buen equilibrio.
Las críticas que recibís en redes a veces no son tan asertivas. ¿Cómo os afectan?
A.: Yo no tengo Twitter desde 2017, yo no recibo esto. Para mí es una realidad que no se corresponde con lo que yo recibo de la gente de la calle. Me preocupa un poco que movimientos pequeños de Twitter se conviertan en preguntas de rueda de prensa y que yo al contestarlas las convierta en realidades que no están pasando. Es lo mismo que pasa con la política, hay movimientos radicales a los que la prensa da voz y acaban convirtiéndose en realidades políticas que pueden destruir nuestra sociedad.
¿Qué creéis que va a enseñar Drag Race a la sociedad?
C.: Creo que este programa, que es muy divertido, demuestra que el drag va más allá del chiste y que es una expresión artística muy compleja, muy cuidada y con mucho trabajo detrás. Creo que va a ayudar a que la gente respete y admire el drag como nosotros lo conocemos. Este programa recuerda algo que para mí es muy importante y que nos quita muchos prejuicios y sufrimientos: nacemos desnudos y el resto es drag.
A.: Ojalá que el mundo del drag cale en la sociedad, porque plantea un montón de cosas, no es un 'disfraz' o una cosa divertida, es un planteamiento disruptivo de dónde ponemos los límites de las cosas, de ser mujer y hombre, de lo que significa lo bueno y lo malo, lo moral y lo amoral. La gente que se dedica al drag nos libera de la carga de ser humanos, de tener que ser de una manera determinada. Las drags nos permiten vivir la fantasía que queramos.
¿Ha influido el programa en vuestra forma de vestir?
A.: ¡Totalmente! Nos hemos dejado llevar por la fantasía. Aunque yo me he visto en Mask Singer y he dicho "cariño, a ti no te hacía falta Drag Race".
C.: No nos cuesta nada venirnos arriba, la verdad (ríe).
A.: A mí particularmente el programa me ha enseñado mucho, me ha señalado de nuevo que a veces tengo conflicto con mi propia pluma y que tenemos que luchar contra eso, no hay una manera de ser hombre o mujer, no son conceptos que existan, son realidades que construimos. Drag Race nos enseña a querernos más, a dejar los juicios, es un programa que viene a cambiar la sociedad.