Los 50 años del ‘Un, dos, tres’ merecían algo más: la incapacidad y dejadez más absoluta de RTVE

El 24 de abril de 1972 Televisión Española estrenaba el Un, dos, tres… Responda otra vez, un concurso que reunía preguntas y respuestas, pruebas físicas, música y humor y que durante diez temporadas se convirtió en una cita ineludible cada semana para millones de espectadores.

Chicho Ibáñez Serrador fue el genio creador y director del programa, que entre 1972 y 2004 descubrió entre sus presentadores, azafatas o artistas a grandes talentos, algunos convertidos en mitos del cine o la televisión: Kiko Ledgard, Mayra Gómez Kemp, Jordi Estadella, Miriam Díaz-Aroca, José Luis Bach y Luis Larrodera se hicieron cargo de la presentación, mientras nombres como Victoria Abril, Silvia Marsó, Lydia Bosch, Nina o Paula Vázquez empezaban a brillar como azafatas, y Bigote Arrocet, el Dúo Sacapuntas o Ángel Garó, como humoristas.

Sin duda una de las grandes marcas de la historia de RTVE que hubiese merecido en su 50 aniversario un gran homenaje a la altura de lo que fue, pero que tristemente pasará completamente desapercibido por la población debido a la deriva en la que está envuelta actualmente la radiotelevisión pública.

Al contrario de lo que ocurrió en su día con el 15 anivesario de Operación Triunfo, cuando se programó una serie de documentales y un concierto para rememorar el fenómeno que supuso el programa, la Corporación ha dejado ahora pasar el tren para volver a apelar a la nostalgia y recordarle a los españoles la importancia de la televisión pública haciendo un homenaje al padre del entretenimiento familiar.

Se podría haber optado por diversas fórmulas. Por un documental en el que se reuniera a sus presentadores, azafatas e incluso localizando a algunos de sus concursantes y, por supuesto, se analizara la importancia de aquel formato al estilo de lo que se ha hecho con series como Friends. 

"En mí habita el Chicho de toda mi infancia. Cuando era niño el momento mas importante de la semana era el Un, dos, tres y además era el único día en el que mis padres me dejaban acostarme mas tarde", confesaba a este medio hace poco Pablo Motos, creador y presentador de El Hormiguero, programa que bebe del Un, dos, tres.

O quizá por una entrega especial del concurso en prime time en el que hubiesen concursado presentadores y azafatas, en la línea de lo que justatamente va a hacer este domingo Jordi Évole convirtiendo Lo de Évole en un programa de los 90 para recibir a Julia Otero.

Múltiples opciones, que bien comunicadas y promocionadas, hubiesen podido reconciliar al espectador con La 1 de TVE en estos tiempos en los que ya ni consigue llegar a la barrera del 9% de cuota de pantalla. Y no sólo audiencia sino también la tan defendida relevancia que pretende recuperar su presidente, José Manuel Pérez Tornero.  

Sin embargo, a tenor de la nota de prensa que se mandó hace unos días a los medios y, tal y como aparecía en su tercer párrafo, el 50 aniversario del Un, dos, tres se "celebrará por todo lo alto" con un nuevo programa presentado por la directora de Comunicación y Participación de RTVE, María Eizaguirre, desde el estudio móvil de La Gran Consulta de RTVE. Tuvo 1.500 visualizaciones en YouTube entre los 1,9 millones de suscriptores que tiene RTVE.

También con una programación especial en La 2 en la que se repetirá el Imprescindibles de Chicho Ibáñez Serrador, la entrega del Un, dos, tres: El mundo del circo, el debut como presentadora de Mayra Gómez Kemp en Las mil y una noches, así como repeticiones del Tesoros de la tele, Cómo nos reímos y Viaje al centro de la tele dedicados al mítico concurso. 

Ya en RTVE Play se ofrece durante este domingo 24 de abril un maratón especial, desde las 12 del mediodía y hasta la medianoche, en el que se recuperán algunas de las entregas más emblemáticas del concurso, como el programa más antiguo conservado de 1972.

La duda siempre estará en si este merecido homenaje no se llevó a cabo por dejadez o incompetencia, o por la serie de recortes que se están llevando a cabo en la Corporación para hacer frente al desorbitado gasto del polémico Mundial de Qatar 2022, por el que se ha pagado entre 30 y 35 millones de euros.

Sea como fuera, tristemente no deja de ser una muestra más de que, todo aquello cuánto prometió Pérez Tornero en su discurso como nuevo presidente, ha terminado convirtiéndose en papel mojado. En la casa ya hay incluso quién dice que hará buenos a José Antonio Sánchez y a Rosa María Mateo. Al menos a ellos se les veía venir.

[Más información: La que se tiene que marchar de TVE es usted, Rosa María Mateo]