Aunque su avanzada edad y sus últimos problemas de salud habían mermado el estado físico de la reina Isabel II, no quita que su fallecimiento haya impactado al mundo, sobre todo a los británicos. Medios de comunicación de todo el mundo se han apresurado en engrasar las rotativas para sacar especiales sobre su muerte, la coronación de su hijo el príncipe Carlos como el nuevo rey Carlos III, y un funeral cuyo protocolo se extenderá durante varios días.
También programas especiales y nuevos documentales que inundarán las pantallas del televisor de todo el planeta, incluidas cómo no, las españolas. De hecho, La 1 adelanta el estreno de Hablando claro a este sábado para cubrir la última hora sobre Inglaterra, que también ocupará un papel importante en la escaleta de los diferentes informativos, Socialité, La Roca, Ya es verano o laSexta Noche, entre otros.
Sin embargo, la televisión de nuestro país cuenta en su haber con un familiar de la propia reina. Y que desde hace veinte años habla cada día sobre temas del corazón, a la par que comenta las últimas horas de los realities de turno de Telecinco. Este es Alessandro Lequio, colaborador habitual de las mañanas de la cadena con El programa de Ana Rosa y El programa del verano.
Este viernes, el exmarido de Ana Obregón daba un titular que sorprendía a sus compañeros de tertulia: “Mi abuela es su tía, se veían todos los veranos”. Aunque según ha confesado a Joaquín Prat, él nunca llegó a conocer a la Isabel II.
El conde acompañaba esta información con fotografías para explicar su relación familiar con Isabel II: "He colgado las fotos en Instagram, en la que se ve se explica mi relación con la monarquía inglesa, está mi abuela, mi bisabuela, mi tatarabuela y mi madre. Mi tatarabuela era hija de la reina Victoria (…) Mi abuela era tía de la reina de Inglaterra y tenían una gran relación, se veían prácticamente todos los veranos, se parecían mucho. Las dos tenían un exigente sentido del deber y las dos eran amantes de los caballos y de los perros". Cabe destacar que la pasión de Isabel II por los animales le ha llevado a tener descendencia de su primera perra en más de una treintena de ocasiones.