La tenso encuentro entre Zapatero y Sánchez en 'Dos días y una noche'
Pedro Sánchez fue el tercero en pasar Dos días y una noche con Susanna Griso. El líder del PSOE fue el protagonista del programa de Antena 3 en prime time, donde la presentadora de Espejo público se propuso sacar el lado más personal y desconocido del candidato a La Moncloa.
El programa hizo un repaso a la biografía de Sánchez desde su juventud e intentó vivir en primera persona cómo es el día a día de un líder presidenciable a través de sus actos de campaña, sus reuniones, sus amistades y su propio discurso.
El encuentro entre Griso y Sánchez comenzó en una vía de servicio, en una gasolinera tomando un café. Y es que, como comentaba la periodista al inicio del programa, el candidato del PSOE vive en campaña en la carretera.
1. "Con Zapatero hablo menos"
Griso y Sánchez hablaban de los líderes anteriores del PSOE y el actual contestaba que "todos tienen algo que aportar, sus ideas y su experiencia", comentó. "No me molesta que tenga una buena relación con Iglesias. Los presidentes son patrimonio de todos. Si yo dependo de los votos de Iglesias, por experiencia digo que no soy presidente del Gobierno", declaró el socialista al comienzo del programa.
2. "La izquierda no se merece perder la oportunidad de gobernar"
Cuando Griso le preguntaba por el sorpasso al que apuntan los sondeos y que coloca a Unidos Podemos por encima del PSOE, el socialista contestaba que "el hecho cierto es que votar a Iglesias es votar contra el Partido Socialista. Lo que dice Iglesias es ámame tú que yo también me amo a mí mismo. La solución que necesita el país es la social democracia que representa el PSOE", dijo Sánchez en el programa.
3. Los ERE de Andalucía
Susanna Griso le preguntaba a Pedro Sánchez por el caso de corrupción más importante que atañe a su partido. El líder socialista trata de explicar cómo se deben atajar escándalos como el de los ERE de Andalucía.
4. Testosterona pura
El líder del Partido Socialista recuerda cómo fueron sus primeros viajes al extranjero por estudios y reconoce la importancia de los idiomas en el panorama político actual. "Yo era testosterona pura", confesó Sánchez sobre su etapa de estudiante.
5. Pedro Sánchez, el romántico
No sólo hubo tiempo para hablar con Pedro Sánchez en este programa de televisión. Griso también quiso entrevistar a su entorno más cerano para conocer un poco mejor cómo es el verdadero líder del PSOE. No había nadie mejor que su mujer, que acompaña a Sánchez a cada debate electoral. Ella le admitía a Griso lo romántico que es el socialista y las cartas de amor que le enviaba.
6. El encuentro entre Sánchez y Zapatero
Si al principio del programa Griso le preguntaba a Sánchez por su tirante relación con Zapatero, llegaba el turno de verlo con sus propios ojos. La periodista vivió en primera persona el saludo entre el candidato y el ex presidente del Gobierno. "Siempre está Venezuela para sacarnos del aprieto", comentaba Griso. El programa grabó una de las conversación entre ambos políticos, demasiado correcta y muy atenta a los movimientos de las cámaras.
7. El peor momento tras el 20D
El líder socialista recordaba cómo fueron los días posteriores a las elecciones generales. "El peor día fue cuando fui a ver al Jefe del Estado y me enteré por una rueda de prensa de la oferta envenenada de Gobierno de Pablo Iglesias", confesó Sánchez. "Me chocó porque creo que las cosas no se hacen así. Lo que me pareció la gota que colmó el vaso fue el escape de Rajoy", dijo el político. "Pensé que alguien me estaba haciendo una trampa".
8. El retrato de Rajoy
Era el propio Pedro Sánchez el que elegía dibujar a Mariano Rajoy en el bloc de notas que le acababa de regalar Griso. "Rajoy es fácil por la barba. Es la primera vez que lo dibujo", aseguraba el líder socialista al enseñar su retrato.
9. Pablo Iglesias es un buen crítico
Susanna Griso le pedía a Sánchez que le dijera algo positivo de cada uno de sus rivales. De Rajoy, el entrevistado destacaba la calma ante la adversidad. "Iglesias es un buen crítico y un buen polemista. Es verdad que acepta mal la crítica, pero es un buen crítico, comentaba sobre le líder de Podemos. De Rivera destacaba su apertura al diálogo.