Poder emitir un programa como Enviado especial en prime time no es algo sencillo. El programa de Jalis de la Serna para laSexta es la punta de un iceberg que ha costado mucho congelar y mantener en pie. Un pico que se asoma por encima de una base de programación que ha ido creciendo poco a poco y que ha conseguido asentarse, acostumbrando a los espectadores a un nuevo tipo de contenidos que hace algunos años se le hubiese atragantado a más de uno. Y eso es en lo que se ha especializado laSexta: a acostumbrar y entrenar.

laSexta nació como una cadena ligada al humor, con mucho más entretenimiento y una matriz mucho más gamberra. Pero el cierre de CNN+ dejó huérfanos a los espectadores que demandaban mucha más información. laSexta dio entonces un giro que permitió a la cadena convertirse en lo que podemos ver hoy en día.

En septiembre de 2011, el grupo decidía pasar su espacio político diario Al rojo vivo de laSexta 2 a laSexta. La cadena principal acogía a partir de ese momento la tertulia y su rumbo político comenzaba a denominar en la parrilla. Las audiencias comenzaron a responder bien y sus resultados eran cada vez mejores. 

Con Salvados como telón de fondo, comenzarían a nacer en laSexta nuevos espacios que permitirían solventar la falta de programas de análisis en la televisión española. Arrancaron programas como laSexta Columna (enero de 2012) Más vale tarde (octubre de 2012), laSexta Noche (enero de 2013), Equipo de investigación (comenzó en laSexta en enero de 2013) o El objetivo de Ana Pastor (junio de 2013).

laSexta se iba asentando, la audiencia respondía de forma positiva y la cadena se confirmó como un referente en información. Ya no había marcha atrás. Este es el verdadero bloque de hielo de laSexta que ha permitido que salgan a flote algunos espacios que estarían más cómodos en una televisión de pago sin tantas exigencias. Y, sin embargo, la cadena se puede permitir este tipo de formatos después de haber acostumbrado a su audiencia durante años a este tipo de contenidos. 

Así nacería en septiembre de 2013 el programa Encarcelados y ha terminado estrenando el espacio Enviado especial que se emite cada martes en la cadena verde. El espacio de De la Serna no está hecho para todos los públicos. Está dedicado a todos aquellos que han seguido la evolución de laSexta durante todos estos años y que ahora reciben su recompensa. Una televisión delicada que ha necesitado curtir a su público durante años. 

Ha enseñado a los espectadores que hay otro tipo de televisión. Ni mejor, ni peor

A pesar de la dificultad de colocar un espacio de este tipo, el programa ha logrado un correcto lanzamiento que no sería posible sin haber enseñado a sus espectadores que existe otro tipo de televisión. Ni mejor, ni peor. Simplemente, que la pequeña pantalla también parte y reparte otro tipo de contenidos. Se estrenó con un 10,1% de cuota de pantalla y bajó a un 6,5% en su segunda entrega. Nadie dijo que fuese fácil el reto. 

Enviado especial es una carrera de fondo. Una licencia que laSexta se puede tomar sin pedir explicaciones. Un claro ejemplo de que la cadena cuida su perfil hasta el final sin miedo a darse batacazos. Y es que por encima de todo está la imagen. Después ya vendrá recoger el fruto sembrado. 

Una apuesta que, de vez en cuando, recibe sus premios. Las noches electorales son algunos de estos galardones. Su apuesta por eventos políticos a los que antes las televisiones daban la espalda ha hecho que laSexta ya no tenga rival en este tipo de noches informativas. Lo que antes era de la televisión pública ahora es de laSexta. Incluso los debates emitidos por todos los grandes grupos han terminado sucumbiendo al poder de laSexta.