Aarón Guerrero: "Ana Obregón quiere hacer una película de 'Ana y los 7'

Dio vida al icónico Chechu en Médico de familia; enloqueció a las adolescentes de media España interpretando a Nando en Ana y los 7; y se dejó seducir por uno de los formatos de telerrealidad de Telecinco.

Aún vinculado al mundo de la interpretación, Aarón Guerrero se reunió el pasado domingo, 27 de noviembre, con Ana Obregón y el resto del elenco que protagonizó la recordada serie de La 1 para grabar un reencuentro para las cámaras del reality show de la bióloga en DKISS. "Ella quiere hacer una película de Ana y los 7", confiesa el intérprete. "Son proyectos. Yo estoy dispuesto a participar en todo aquello que me parezca interesante. Yo no llamo de manera desesperada a la gente para saber si se va a hacer algo o no. Yo estoy aquí y cuando alguien quiera contar conmigo para hacer algo chulo, encantado. Ahora estoy con mi negocio", concluye.

Hastiado con la situación de la industria interpretativa en España, el madrileño ha abierto sus miras a otros modelos de negocio y lleva desde hace unos años vinculado a la gastronomía, regentando sus propios restaurantes. "La malaje es mi tercer restaurante", cuenta Guerrero a BLUPER. "Antes de este proyecto tuve un restaurante llamado Alta costura, hace cinco años, con dos franquicias. Hace unos meses surgió este proyecto con Manuel Urbano, mi socio, jefe de cocina del que era mi restaurante favorito, y me contó que tenía ganas de cambiar de aires y crecer un poco. Nos unimos y empezamos con este nuevo local hace 9 meses y estamos muy contentos. La respuesta de la gente y la crítica está siendo buenísima. Queremos abrir en 3 o 4 meses una nueva sucursal en otro punto de Madrid", relata.

¿Te veremos pronto en televisión con un nuevo proyecto?

Sigo haciendo cosas esporádicas en televisión cuando cuentan conmigo, pero no tengo nada fijo. Ahora mismo estoy en conversaciones para protagonizar una serie en Canal Sur. Estoy en contacto con el director para grabar el piloto y parece que la respuesta de la cadena, por el momento, es positiva. Sería para comenzar a rodar dentro de dos meses.

¿Nos puedes adelantar un poco más de esta nueva ficción?

La productora y el director son la misma persona. Ahí título, pero aún no se puede desvelar. Será emitida en formato semanal y es una comedia bastante coral.

Hace poco veíamos cómo te reencontrabas con tus compañeros de Ana y los 7 en tu propio local. Ahora mismo, la televisión de todo el mundo se retroalimenta de la nostalgia. Reencuentros, reuniones, spin-off y revivals. ¿Por qué crees que productoras y cadenas siguen recurriendo a ciertos actores para volver a encarnar papeles que enamoraron hace años al público?

Los directores en España son muy torpes. Parece que porque hayas hecho dos personajes en TV ya no puedes hacer ninguno más

No lo sé. Lo del encasillamiento existe y es verdad que Chechu marcó mucho y estuve interpretándolo durante 5 temporadas, como hice con Nando en Ana y los 7. Es mucho tiempo. En España los directores son muy pesados con el tema de que quieren caras nuevas. Parece que porque hayas hecho dos personajes ya no puedes hacer ninguno más. Es una cosa que yo siempre les hecho en cara. Quizá si he estado en dos series que han funcionado de puta madre, no seas tonto, porque quizá tengo esa suerte. Les encanta quemar y trabajar mucho a los actores y luego fuera, uno nuevo. Esto no es como en Estados Unidos, donde los actores pueden estar trabajando durante toda su vida, haciendo diferentes papeles. Los directores en España son muy torpes.

¿Alguna vez llegaste a plantearte tirar la toalla en el mundo de la interpretación?

No es retirarme o no. Yo he seguido con mi vida, nunca he perseguido estar en televisión. Lo que ha surgido lo he hecho porque me han llamado. Yo ahora mismo no tengo ni representante. Con eso lo digo todo. Quien quiere contar conmigo me llama directamente. Yo he hecho mi vida paralela, con mis otros negocios, y lo que ha ido saliendo de ese tema lo he valorado. Tengo ganas de volver a hacer cosas. Pero no estoy desesperado. Eso es bueno, porque hay otros actores que no saben qué hacer cuando no les sale ninguna oportunidad. Yo ahora tengo mis negocios y si sale algo muy bien. Yo soy una persona que no me gusta estar quieta, que no me gusta estar parado. Al ver. Soy inquieto.

Caíste en las garras de uno de los formatos de telerrealidad de Telecinco. ¿Te arrepientes? ¿Se te han cerrado puertas como actor desde entonces?

Fue una experiencia muy divertida. Pasamos un mes y medio rodando la segunda edición de ¡Mira quién salta! y fue muy chulo. Estuvimos en un hotel de Aranjuez donde estábamos recluidos y conocí a gente con la que mantengo muy buena relación. Yo al principio era un poco reacio a estas cosas. Luego me dije: "¿por qué no?". Al final lo peor que puede pasarte en la vida es arrepentirte por no haber hecho algo. Mejor hacerlo y que sea lo que tenga que ser. Fue más un talent show que un reality. No es un Gran Hermano. Estás haciendo un deporte al fin y al cabo e intentando superarte. Es un reto.

Por tus palabras deduzco que te habrán propuesto en infinidad de ocasiones entrar en la casa de Gran Hermano VIP o ir a Supervivientes...

Me pensé participar en Supervivientes. A GH VIP le digo que no radicalmente

Sí. A Gran Hermano VIP le dije, por supuesto, que no. Radicalmente. Y cuando me propusieron Supervivientes, no te voy a engañar, me lo pensé. Lo vi como un reto. Es algo divertido, pero luego preferí mantenerme al margen de estos formatos. No por nada, lo respeto. Me parecen superbien y va gente muy interesante, pero yo, personalmente, prefiero no entrar. También, una de las razones, porque no me puedo ir dos meses a una isla, tengo mi restaurante.

En términos cualitativos, la ficción española ha dado un paso adelante con series de televisión tan aplaudidas por la crítica y el espectador como El ministerio del tiempo o Vis a vis. ¿Qué reflexión haces de esta nueva época dorada de la televisión en nuestro país?

La verdad es que no veo mucha televisión. No te voy a engañar. Lo que sí que te diría es que echo de menos series como Médico de familia, Farmacia de guardia o Verano azul. Series que reunían a toda la familia delante de la tele. Como Los Serrano que, para mí es la última serie que ha logrado algo así. Las echo de menos.

Emilio Aragón se lanza a la producción y dirección de Pulsaciones, el nuevo proyecto de Globomedia para Antena 3. ¿Qué te parece este cambio de registro?

Me parece genial. Es una persona que siempre a tenido un talento alucinante e ideas muy buenas. Creo que es una persona muy preparada. Se ha preocupado en formarse mucho en todas aquellas disciplinas que le apasionan. Además es un tío muy listo. Quizá no sea el mejor actor del mundo ni mucho menos, pero ha sabido hacer sus shows y ha sabido hacer personajes carismáticos. Al ver que no era el mejor actor del mundo se ha dedicado a trabajar con su productora, a escribir y a crear. Tiene un talento máximo.

¿Sigues en contacto con tus compañeros de reparto de Médico de familia y Ana y los 7?

Preparé un piloto para un programa de entrevistas con Lydia Bosch

Tengo mucho contacto con Javivi, que viene a comer un día a la semana aquí. También con Roberto Álvarez. También tengo mucho contacto con Lydia Bosch. Me llevo superbien con ella. Es un encanto. Hace poco estuve con ella para un piloto que preparé de un programa de entrevistas. Me dijo que sí desde el primer momento y, pese a que no nos vemos a menudo, cuando coincidimos hay mucho cariño.

¿Qué ha pasado con ese proyecto?

Ahí está. Estamos vendiéndolo. Mezla gastronomía con entrevistas. El entrevistado elige su restaurante favorito de España y le hacemos una entrevista en ese restaurante. El chef y el dueño del restaurante también participan. Queremos darle la importancia que tiene en nuestro país la gastronomía, quizá una de las aportaciones más grandes que los españoles damos al turismo. De hecho dicen que los chefs son los nuevos futbolistas. La entrevistadora de este programa es Alexia Rivas y se llama Como en casa. Santiago Secades de la productora Una décima de segundo y yo nos estamos encargando de moverlo.