La fractura entre Jorge Javier Vázquez y la audiencia de Gran Hermano VIP se hizo más evidente que nunca el pasado jueves cuando los seguidores del formato criticaron con dureza al presentador por censurar al defensor de El Koala en plató tras denunciar tongo. 

"Ante este tipo de comentarios que atentan contra la integridad de las personas que hacen este programa, no quiero hablar más contigo", dijo el presentador, haciendo que las redes sociales se llenaran de comentarios acusándole de despótico.

Sin embargo, en vez de recular, el catalán volvió a calentar los ánimos con una declaración de lo más soberbia. "Me están contando que me han hecho un traje en las redes. Yo solo uso Instagram para ligar. Pero para todos ellos: ancho de hombros, estrecho de culo", soltó en directo.

Ahora sabemos, sin embargo, que aquello fue simplemente una pose. Y es que Vázquez ha reconocido en su blog en Lecturas que la gala del jueves le dejó baldado. "A las ocho y pocos minutos recibo la audiencia: 31.5, una barbaridad. Comienzan a llegar los consabidos mensajes de felicitación. Pero conforme va pasando la mañana me pongo cada vez más triste y me invaden unas incontrolables ganas de llorar".

"Reviso mi Instagram y le doy a “Rechazar todo” porque veo por encima que hay algunos mensajes claramente insultantes. Leo los titulares de dos artículos que no me dejan excesivamente bien –por ser suave– y noto que voy cayendo en un pozo cada vez más negro. Hablo con Adrián y le traslado mi inquietud. Creo que me entiende", continúa. 

"Estoy convencido de que lo que me pasa tiene que ver el cansancio físico, con dormir mal y a deshoras, pero no puedo evitar pensar que me quiero ir. Dejarlo todo. Desaparecer. Desconectar durante tres meses, un año entero, irme a una playa con los perros".