El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, hizo hoy “una llamada a la responsabilidad” de administraciones, ganaderos y veterinarios a la hora de abordar los casos de tuberculosis bovina y dejó claro que “con la sanidad animal no se juega” porque “es un tema muy serio”.
“Los que hemos estado de la mano de todo el sector ganadero para conseguir lo que hemos conseguido en España, que es estar dentro de la Unión Europea y del mundo en uno de los estándares más altos desde el punto de vista de la sanidad de las explotaciones y hay que conservar ese estatus”, afirmó Planas en relación a la polémica surgida en torno a las palabras del consejero de Agricultura y Ganadería, Gerardo Dueñas, en las que hablaba de un nuevo enfoque en el saneamiento ganadero tras el indulto de cabezas de ganado en una explotación de León donde se detectó tuberculosis bovina.
En este sentido, Gerardo Dueñas aseguró que en Castilla y León no se ha hecho ningún cambio respecto a la legislación nacional, sino que se ha llevado a cabo un plan de actuación tras la existencia en una misma zona de casi 700 cabezas afectadas por cuatro animales positivos, según informa Ical.
“Se ha tomado una medida concreta de no sacrificar el 100 por cien, sino solo a las positivas y a partir de ahí se ha hecho un Plan de Acción ya firmado por los ganaderos con unos compromisos importantes de bioseguridad y que lleva aparejado una serie de muestras y controles más exhaustivos de los desarrollados hasta ahora en las explotaciones”, expuso Dueñas, al tiempo que dejó claro que “la Consejería de Sanidad sigue con el plan nacional de erradicación y no va a ir en contra de la legislación”, aunque “en situaciones tan importantes a nivel de número de cabezas se ha pensado en otra forma de controlar la enfermedad”.
En este sentido, Gerardo Dueñas resaltó haber hablado ayer con el consejero de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, Juan Carlos Suárez-Quiñones, para estudiar la posibilidad de “implantar alguna medida vinculada a las especies cinegéticas". "Cada vez pensamos que tienen más influencia en el desarrollo de la enfermedad”, lo que “tiene que obligar a cambiar alguno de los parámetros de control”, sentenció.