"Muy bien posicionados" a nivel de esfuerzo de innovación, pero en el "último vagón en como cuánto de esa innovación se hace de forma colaborativa". Ese es uno de los focos y deberes que se han puesto los centros tecnológicos de Castilla y León para aupar el sector y "competir en Primera División". Así lo ha manifestado el director gerente de la Asociación de Red de Centros Tecnológicos de la Comunidad (NODDO), Eduardo Andrés Martínez, durante el foro 'Año Cajal: ciencia e investigación en Castilla y León', organizado por este periódico.
En una mesa redonda titulada 'Centros de Investigación e Innovación tecnológica de Castilla y León', moderada por el periodista Jesús Ignacio Fernández, Andrés Martínez ha enfatizado en esa "transferencia de la tecnología y la valorización" como uno de los "vectores donde mejorar" en los próximos años.
En la mesa también han participado tres representantes de tres de los centros referencia de la Comunidad: Mar Siles Lucas, directora del Instituto de Recursos Naturales y Agrobiología de Salamanca (IRNASA-CSIC); Sergio Sanz Hernando, subdirector del centro tecnológico de CARTIF; y Jorge Ordás Alonso, director de Operaciones del Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE).
Tres centros de investigación referente que abordan distintos ámbitos y que catapultan a Castilla y León como una potencia en el sector. Por ejemplo, CARTIF lleva desde el 1994 impulsando el desarrollo de la tecnología para aumentar la competitividad de las empresas desde cuatro ámbitos que también aportan a la sociedad. Desde el centro de IRNASA-CSIC dirigen sus líneas de investigación al sector agro. El INCIBE, por su parte, es una sociedad mercantil estatal que hace de soporte y de impulso al sector de la ciberseguridad.
Para el director gerente de NODDO todo esto es demostración de que la innovación y la investigación de Castilla y León "goza de buena salud", pero teniendo presente que existe un "margen de mejora". Es aquí precisamente donde ha focalizado en esa importancia de la transferencia de la tecnología para hacer esa "innovación colaborativa" que aporte valor al sector. "La clave no está únicamente en cómo de competitiva son las entidades, sino en la relación entre ellas. Eso nos hará mejores", ha incidido.
CARTIF, situado en el Parque Tecnológico de Boecillo (Valladolid), tiene como "obligación" hacer uso de los fondos públicos que captan para desarrollar nuevas tecnologías e innovaciones que se puedan aplicar en el ámbito empresarial. Para ello, trabajan en diferentes ámbitos de investigación y uno relevante es el sanitario, centrándolo en los cuidados.
"Trabajos la doble vertiente. Es verdad que en este caso no buscamos a la industria como tal, sino que buscamos impactar a través del servicio público. Nuestra estrategia es desarrollar tecnología y ponérsela a la Administración Pública", ha puntualizado el subdirector del centro.
Otros casos como el del INARSA-CSIC, según ha aseverado Mar Siles, enfocan sus estudios a ámbitos como los suelos contaminados, donde investigan la contaminación tanto orgánica como inorgánica. "Buscamos métodos para evitar esa contaminación, pero también para revertirla y hacer que los sistemas sean más productivos y sostenibles", ha añadido.
No obstante, a pesar de contar con muchos proyectos a nivel europeo, no dejan de lado las "necesidades del entorno", bien sea a través de la Administración autonómica o la Diputación de Salamanca y el Ayuntamiento de Salamanca, que les trasladan esas "necesidades" y para las que tratan de encontrar soluciones "desde la investigación básica para evitar o mejorar ese problema".
Mar Siles ha reconocido, eso sí, que el sector bio tiene claro que ha de tener una transferencia de esos conocimientos, pero esto no es así dentro del sector agrario y es aquí donde están focalizando sus esfuerzos. Por ello, tratan de "reforzar ese camino" a través de una macroestructura con las administraciones, donde ha anunciado la creación de un edificio HUB de interacción entre el sistema investigador y el productivo.
También han focalizado sus esfuerzos en la atracción de talento que quiera volver desde el extranjero y han puesto el foco en la captación de la financiación internacional, donde Castilla y León ha tenido un "exitazo" en los "contratos para los 'Messis' de la investigación". "Eso es importante para la región porque somos punteros. Aquí tenemos que invertir", ha sentenciado.
Desde el INCIBE se ha destacado, además, el trabajo con las universidades, donde tienen depositados 50 milones de euros para la puesta en marcha de 22 cátedras y 49 proyectos estratégicos de innovación. También trabajan en materia empresarial donde cuentan con un programa de emprendimiento desde la "ideación del proyecto hasta que llega a fraguar y acompañamiento en la internacionalización", dotado con otros 50 millones de euros.
Y esto no acaba aquí, también destaca un programa de captación de fondos para cuando se acaben los Next Generation, en el cual andan diseñando una estrategia. Además, cabe destacar que el ámbito de la ciberseguridad se ha postulado como uno de los mercados más atractivos, ya que han registrado una falta de 40.000 profesionales.
"Por eso es importante ayudar a las universidades para crear másteres y líneas en materia de ciberseguridad. Los estudiantes tienen la oportunidad de hacer algo que les va a dar trabajo nada más terminar", ha recalcado Jorge Ordás.