El Real Valladolid ha viajado hasta Castellón para enfrentarse al Villarreal en un partido decisivo que terminado con el mejor resultado para el conjunto blanquivioleta, un 1-2 a favor del equipo de Ronaldo que le ha hecho ganar tres puntos de oro en la clasificación y que ha regalado a Paulo Pezzolano su primera victoria como entrenador del conjunto. 

El Valladolid ha conseguido imponerse en un encuentro entendido por la afición como un pulso entre la Champions del Villarreal y el descenso del Pucela. Sin embargo, no cabe duda de que en esta ocasión la suerte estaba del lado de los últimos, pues, contra todo pronóstico, han conseguido que su vuelta a casa venga acompañada de un muy buen sabor de boca, gracias a los goles de Amallah y El Yamiq, y al impecable trabajo defensivo del resto del equipo.

El Valladolid ha demostrado durante los 99 minutos de partido una solidez envidiable. Tanto es así, que el único gol en contra llegó con un disparo lejano en un momento en el que un jugador del Pucela se encontraba tendido en el área a causa de un pisotón.  

El conjunto blanquivioleta celebró su primer gol en el minuto 2, después de que Amallah, compinchado con Larin, se plantase ante Reina logrando meter el pie derecho para disparar el balón. 

Y es que, aunque a medida que fue pasando el tiempo el equipo de Ronaldo se fue encontrando a unos locales que cada vez iban ejerciendo más presión y ganando terreno en el campo, este sacó pecho y, sin amedrentarse, fue creciéndose poco a poco y sin parar hasta la llegada del segundo gol, aunque pudieron ser muchos más. 

El miedo se les metió en el cuerpo cuando en el minuto 15 el Villarreal marcó un gol. Pero el Pucela volvió a respirar al quedar invalidado por fuera de juego tras la revisión del VAR.

En el minuto 23, Larin tuvo su oportunidad. Sin embargo, su disparo resultó desviado. 

Estaba a punto de terminar la primera parte cuando Masip, el capitán, abrió la puerta al segundo tanto. Tras ello, haciendo gala de su vocación ofensiva, El Yamiq se plantó en el área rival para recortar a su marca y batir al portero en el minuto 35. 

Parecía que el partido estaba relativamente hecho. Pero nada más lejos de la realidad. Todavía quedaban muchas cosas por pasar. 

Si algo marcó la segunda parte de la jornada eso fue la tensión. El Valladolid aguantó el tipo como pudo, ya que con el paso de los minutos el Villarreal se fue haciendo con la bola. Sin embargo, nadie pudo evitar el gol de Capoue, el cual no estuvo exento de polémica, teniendo en cuenta que este se produjo cuando El Yamiq yacía tendido casi en el punto de penalti tras sufrir un pisotón. 

Pese a ello, el Pucela supo crecerse de tal manera, que en los minutos restantes supo aprovechar los espacios para matar el partido. Hubo dos oportunidades, una de Kenedy en el minuto 89 y otra de Sergio León en el 97, pero ambas acabaron en córner tras las paradas del portero. No fue hasta casi el minuto 100 cuando el Valladolid consiguió volver respirar tranquilo. 

Ahora, las miradas están puestas en el partido del próximo 22 abril, un encuentro muy importante que el equipo de Ronaldo disputará en el José Zorrilla junto al Girona.