Las operaciones con turismos y todoterrenos de segunda mano contabilizaron un total de 163.715 unidades durante el pasado mes, de tal forma que se vendieron 2,7 usados por cada nuevo
En lo que va de año, el mercado de ocasión suma 1.427.551 unidades vendidas, lo que supone un 15,8% más, aunque todavía un 4,3% por debajo de 2019
El mercado de ocasión ha caído en Castilla y León en un 20,3% en comparación con el mismo mes de 2020, hasta situarse en las 8.012 unidades, según datos de las patronales Faconauto y Ganvam.
En el acumulado del año las ventas aumentaron en un 17,4% con respecto al año anterior hasta alcanzar las 73.530 transferencias.
Por provincias, los mayores descensos se produjeron en Ávila (donde se vendieron 525 unidades, lo que supone un descenso del -28 por ciento respecto al mismo mes del año pasado), y Palencia, cuya bajada representa el -26 por ciento y el número de vehículos que se transmitieron de 529. En la cara opuesta nos encontramos a Burgos, donde se traspasaron 1.171 unidades, con una caída del -17 por ciento, y Zamora, con 525 coches vendidos y -14 por ciento.
Las ventas de turismos y todoterrenos de ocasión encadenan tres meses de caídas al registrar un descenso del 13,5% en septiembre en comparación con el mismo mes de 2020, hasta situarse en las 163.715 unidades, según datos de las patronales de concesionarios y distribuidores.
De esta forma, en septiembre, por cada vehículo nuevo se vendieron 2,7 de segunda mano. En lo que va de año, el mercado de ocasión acumula un total de 1.427.551 unidades vendidas, lo que supone un 15,8% más, aunque todavía un 4,3% menos que en el mismo periodo de 2019, lo que sitúa el ratio VO/VN en 2,2 a 1 hasta septiembre.
En un análisis por tramos de antigüedad, los modelos que mejor se comportaron durante el pasado mes fueron los comprendidos entre los 5 y los 8 años. Así, en un entorno de caída generalizada, estos modelos fueron los únicos que marcaron signo positivo en septiembre, con una subida del 7%, hasta alcanzar las 14.972 unidades, situándose un 36,6% por encima del mismo mes de 2019.
Para las patronales, este comportamiento responde a que, ante la falta de stock provocado por la crisis de los chips, fue necesario recurrir a los mercados exteriores en busca de oferta. De hecho, la importación fue el único canal que creció en septiembre, con un total de 7.917 unidades, lo que supone una subida del 5% con respecto a 2020 y nada menos que un 26,4% más que el mismo mes de 2019.
Por su parte, los modelos de más de 15 años fueron los que menos cayeron, al registrar un descenso del 1,2%, con un total de 58.420 unidades en septiembre, lo que significa concentrar más de la tercera parte del mercado; en concreto un 35,7% del total.
Según datos de las patronales, el 51% de las ventas de estos vehículos tan antiguos se realiza entre particulares; un canal que, si bien retrocedió un 9% el mes pasado, continúa concentrando casi seis de cada diez operaciones.
Respecto a las fuentes de energía, las operaciones con usados diésel cayeron un 13,7% en septiembre con respecto al mismo mes del año anterior, aunque siguen representando casi seis de cada diez operaciones. Los de gasolina, por su parte, se contrajeron un 17,6% con respecto a septiembre de 2020. En contraste, los modelos eléctricos puros de segunda mano crecieron un 131,8% en el mes, hasta alcanzar las 1.013 unidades; mientras que las operaciones con los híbridos enchufables de ocasión se dispararon en septiembre. Así, los diésel/eléctrico enchufables registraron 119 unidades vendidas (+693,3%), frente a las 1.061 unidades de los gasolina/eléctrico enchufable (+226,5%).
El sector se tambalea
Estos datos, unidos a la caída de las matriculaciones de vehículo nuevo en Castilla y León (con 1.685 unidades registradas en agosto de este año, concretamente un 32,8 por ciento menos respecto al mismo mes del año pasado), hacen pensar en una crisis en el sector.
Al hilo de esto, el director de comunicación de FACONAUTO, Raúl Morales, afirma que “los mercados de vehículos nuevos y de ocasión funcionan como una cadena de transmisión y, en este caso, el segundo se está viendo afectado también por la crisis de los microchips, ya que la caída en las matriculaciones está haciendo que no se genere tampoco el stock de vehículos de 0 a 5 años capaz de atender la demanda, lo que explica el retroceso en el número de transferencias de usados. Es una muy mala noticia, porque nos alejamos cada vez más del mercado saneado y dinámico al que debemos aspirar y nos vemos abocados a uno en el que los coches de más de diez años ganan terreno sin parar”.
La directora de Comunicación de GANVAM, Tania Puche, recuerda que “la oferta de vehículos de 3 ocasión también hay que “fabricarla” y como debido a la crisis de los chips, no hay renovación de flotas, no se está inyectando stock al mercado de segunda mano. Por tanto, ante el impacto que la escasez de conductores está generando también en el mercado de usados, corregimos a la baja la previsión de cierre para 2021, estimando que las ventas de ocasión se quedarán en el entorno de los 1,9 millones de unidades. Estamos hablando de un crecimiento del 8% con respecto a 2020, pero un 6% por debajo de 2019”.