El director del Servicio de Estudios Económicos de Castilla y León (ECOVA), Juan Carlos de Margarida, ha presentado este miércoles el Observatorio Digital de 2022 y ha alertado de las escasas competencias digitales de empresas y trabajadores de Castilla y León. De Margarida ha apostado por una integración amplia de las pymes y autónomos de Castilla y León para completar la transformación digital y ha alertado de que la brecha digital persiste en la economía regional.
El director del ECOVA ha destacado, además, el importante papel que deben jugar la administración y las asociaciones empresariales para convencer a las empresas de que "apuesten" por la digitalización. En lo relativo a las microempresas, micropymes y autonómos, el director del ECOVA ha alertado de que solo el 1,17% cuentan con algún trabajador con conocimientos tecnológicos. Además, ha mostrado su preocupación por el hecho de que solo existe un 32,2% de mujeres expertas en esta materia en las empresas y que solo el 18% de las pequeñas y medianas empresas se han preocupado de que sus empleados se formen en estas tecnologías.
También ha alertado del precoupante descenso del teletrabajo que, a su juicio, garantiza mayores posibilidades de conciliación y más productividad para las empresas. Según ha informado, un 26,7% de las empresas de la región han permitido el teletrabajo pero existe cada vez menos, con un descenso del 36,5%, y ahora solo un 8% lo emplean de forma habitual, calificando el dato como "muy pobre" y señalando que esta realidad va en contra de una mayor "conciliación y productividad".
De Margarida ha apuntado a que existe un elevado grado de "incertidumbre política y económica" y una gran desconfianza y que hace falta más dinero para afrontar los cambios digitales. A juicio del director del ECOVA, las pymes necesitarían concentrar esfuerzos, porque la falta de digitalización "merma" su crecimiento, y también mejorar la eficiencia de sus procesos, innovar productos para ampliar su abanico de exportaciones, impulsar un mayor uso de las tecnologías avanzadas y una mayor flexibilidad laboral. De Margarida ha asegurado que es necesario que las empresas cuenten con "una estrategia digital precisa" y ha destacado el papel determinante de la administración autonómica para solucionar esta situación.
De Margarida defiende la subida del SMI
El director del Servicio de Estudios Económicos de Castilla y León (ECOVA), Juan Carlos de Margarida, ha defendido este miércoles que la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) de 1.000 a 1.080 euros es "una garantía" para el ciudadano y que revierte en beneficio de todos los sectores. Además, ha abogado por una bajada "coyuntural" del IRPF para ajustarse a la realidad socioeconómica. Así se ha pronunciado a preguntas de los periodistas tras la presentación del Observatorio Digital de 2022 en la sede del ECOVA.
De Margarida ha alertado de que existe una inflación desbocada y de que los costes energéticos derivados de la Guerra de Ucrania "han cambiado el panoram y se han incrementado los costes de muchas empresas. Y ha vinculado ese incremento de los costes con una disminución de la capacidad adquisitiva del ciudadano, recordando que "el motor de la economía es el consumo".
El director del ECOVA ha recordado que cuando el ciudadanía ve reducido su poder adquisitivo deja de consumir y viene "la pescadilla que se muerde la cola" y se ha mostrado, por tanto, favorable a esa subida del SMI que garantice mayor capacidad de consumo, asegurando que puede ser "una garantía" para el ciudadano de que su sueldo se está equiparando a la realidad económica y que revierte en beneficio de todos los sectores económicos.
De Margarida ha abogado también por deflactar el IRPF, con un descenso dirigido a ajustarse a la realidad socioeconómica que existe en estos momentos, pero como una medida "coyuntural" mientras dure esta situación de crisis para volver, posteriormente, a la situación previa.
Una realidad socioeconómica de incertidumbre
De Margarida ha hecho un recorrido por los acontecimientos que han conducido a una realidad socioeconómica "de incertidumbre" para las empresas de la región. Entre ellos, ha destacado el debilitamiento de la economía mundial, la crisis energética y la Guerra de Ucrania, la elevada inflación, un mercado laboral en decrecimiento e inestable, una disolución de empresas cada vez más numerosa, una disminución de las exportaciones y unos sectores empresariales con altos niveles de "desconfianza e incertidumbre".
Para el director del ECOVA, la digitalización da "una respuesta clara" a algunos problemas que existen en la región y la transformación digital es "clave" para la recuperación de la economía de Castilla y León. Además, ha asegurado que los fondos Next Generation son necesarios para sufragar la transformación y para reactivar la economía y que es necesario que la gestión de los fondos "sea compartida" por los Gobiernos autonómicos para que pueda llegar a la realidad de las pequeñas y medianas empresas y autónomos de la región.
Algunos datos
De Margarida ha destacado también algunos datos extraídos del Observatorio. En concreto, ha apuntado a que la inversión de bienes de tecnología de la información se ha incrementado un 3,33% y que Castilla y León ha ganado competitividad tecnologica" Sin embargo en materia de telecomunicaciones, el director del ECOVA ha señalado que ha habido una pérdida de capacidad de inversión e innovación.
El economista ha apuntado, además, a que en Castilla y León se ha incrementado un 29,6% el software de tecnología avanzada, y que es la región de mayor crecimiento inversor. Pero ha asegurado que existe "un descenso significado" en número de especialistas en tecnología en las empresas y la Comunidad debería capacitarse para "retener y atraer" trabajadores con esas capacidades digitales.
Por último, ha señalado que se han incrementado en un 10% las empresas TIC que se encuentran entre las mayores de la región, pero que eso no se ha traducido en un aumento de empleados, que han disminuido.
Una transformación digital con "limitaciones y amenazas"
De Margarida ha hecho hincapié también en las limitaciones y amenazas de la transformación digital, como la incertidumbre sobre futuras normas digitales, la falta de perfiles cualificados y la burocracia excesiva. Además, ha hecho hincapié en que la madurez digital de las pymes de Castilla y León está por debajo de la media europea.
También ha puesto el foco en el ámbito rural, asegurando que las pymes presentes en este territorio cuentan con "un grave problema" a la hora de ser competitivas e innovar. Y ha destacado también algunas debilidades como la falta de recursos financieros, las escasas habilidades digitales y la escasa dimensión empresarial o la debilidad de la escasa inversión en I+D+i.
Todo esto, a juicio de De Margarida, se encuentra agravado por la elevada presencia de pequeñas y medianas empresas y su "escasa digitalización". Y ha concluido recordando que existe también un capital humano "atrasado" en capacidades y conocimientos digitales, hace falta creación y atracción del talento digital, y existe una persistencia constante de las brechas digitales territorial, socioeconómica y empresarial.