El Ministerio de Hacienda ha dado el visto bueno a reducir los módulos del IRPF para agricultores y ganaderos, que supondrá una rebaja fiscal de hasta 1.093 millones de euros.
Una orden publicada hoy en el BOE que beneficiará a 900.000 trabajadores del campo en toda España, según recoge Ical, y que se suma a la del 20% en el rendimiento neto aprobada para todo el sector agrario en el Real Decreto-Ley 4/2022 de medidas para paliar los efectos de la sequía y el incremento de los costes de producción.
Ayer mismo, COAG de Castilla y León denunciaba los sobrecostes a los que tienen que hacer frente los profesionales del campo tras el encarecimiento de los inputs con dos hechos que ha puesto patas arriba la Economía: la pandemia y la guerra iniciada por Rusia en Ucrania.
Según esta organización agraria, los precios de los fertilizantes se han incrementado un 300% sobre todo por la dependencia de Rusia y Ucrania dado que los fertilizantes nitrogenados necesitan gas para su elaboración, el gasóleo ha subido un 75% en Castilla y León, los piensos una media del 40%, La electricidad, por su parte y tras haberse disparado un 500%, comienza a ajustar sus precios", si bien el precio medio de la luz se sitúa hoy en los 208 euros por MW/h.
Una inestabilidad que comenzó con el desajuste producido por la pandemia y que se agudizó tras el estallido de la guerra en Ucrania dado que el gas natural es la principal materia prima para la obtención de estos fertilizantes y supone el 80% de los costes para su elaboración.
COAG pide nuevas políticas del agua
Esta medida ha sido acogida con satisfacción por parte de las organizaciones agrarias, pero consideran que no es suficiente dado que no ataja uno de los principales problemas a los que se enfrenta el campo de Castilla y León: la sequía.
En este sentido, Lorenzo Rivera, coordinador de COAG en la Comunidad, advierte de que "aunque no se puede hablar aún de sequía, si las temperaturas siguen así tendremos problemas con una reducción de cosecha de cereal, colza, leguminosas y forrajes", que es lo que se plantó en la campaña de otoño-invierno.
En este sentido, Rivera considera que el Gobierno "debe tener en cuenta por qué todas las OPAS hemos mostrado nuestro rechazo al Plan Hidrológico Nacional, que no ataja el problema para hacer el campo más eficiente. Necesitamos un plan ambicioso que salve el regadío, que a su vez salve la ganadería y la fijación de población en el medio rural".
El sistema de estimación objetiva agraria es el mayoritario entre los agricultores y ganaderos de nuestro país. Las reducciones de módulos aprobadas en esta orden se traducen en una disminución proporcional de la base imponible derivada de los rendimientos de la actividad agraria.
Asaja lamenta que se excluya al sector de la patata
Por su parte, José Antonio Turrado, secretario general de Asaja en Castilla y León, ha valorado la medida aprobada hoy por el Gobierno de reducir los módulos del IRPF para agricultores y ganaderos para aliviar la tensión económica que arrastra el campo con el escenario actual. A falta de conocer los datos de beneficiarios de esta medida en la Comunidad, Turrado considera que es una medida "necesaria" que ya habían demandado las OPAS.
La Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores de Castilla y León ha valorado la medida aprobada por el Gobierno y ha destacado la reducción del índice al 0,5 de los por piensos adquiridos a terceros, siempre que representen más del 50% del importe de los consumidos.
Además, considera positiva la reducción del índice al 0,75 cuando los cultivos se realicen en tierras de regadío que utilicen a tal efecto la energía eléctrica. Pero esta asociación considera un error que no se haya incluido esta reducción en el IRPF ae la patata para el conjunto de la Comunidad, a pesar de haberse producido durante el año 2021 una "significativa caída" de los precios que recibe el agricultor.
Asimismo, desde Asaja continúan reivindicando que se cumpla con la obligación recogida en la Ley 11/2020 de establecer reglamentariamente una modalidad de contrato que contemple las dos potencias diferentes en función de las necesidades de suministro del regadío, "máxime cuando en la actualidad los costes eléctricos se han disparado y resultan inasumibles para los agricultores, así como la de reducir los costes de producción que soporta el sector agrario independientemente del sistema en el que se tribute".
Por último, esta asociación recuerda que "estas medidas benefician exclusivamente a las explotaciones que están adscritas al sistema de módulos, que numéricamente son las más numerosas, pero deja fuera a otras que están obligadas a cotizar en otro régimen fiscal, bien por estar más dimensionadas o bien por gestionarse bajo fórmulas jurídicas asociativas, algo muy frecuente en el caso de granjas ganaderas como el vacuno de leche".