La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) pidió de manera urgente trabajar para lograr un pacto de Estado de todas las administraciones para hacer frente a los incendios forestales, que ponga "el foco en la prevención y cuente con la población del medio rural, en especial con los agricultores y ganaderos, cuyos servicios ecosistémicos se han puesto en entredicho en los últimos años". Además, solicitaron la declaración de zona catastrófica en las áreas afectadas por los incendios.
En un comunicado recogido por Ical, la organización agraria vinculó esta proliferación de grandes incendios con "la prohibición y el abandono de actividades tradicionales en el medio rural", como la trashumancia, la recogida de leña, la quema de restos de poda o los desbroces de caminos y parcelas. "El cambio climático y la ola de calor desde luego tienen su parte de culpa, pero no pueden ser la excusa que justifique los incendios", aseguraron.
"La mejor estrategia para prevenir incendios forestales, así como para extinguirlos en el caso de que se produzcan, es mantener limpio el monte, y para ello nada mejor que la ganadería extensiva", apuntaron. Sin embargo, añadieron que España ha perdido diez millones de ovejas en la última década.
Trasladaron que se está invirtiendo recursos en medios en extinción, pero que "apenas hay inversiones en medios preventivos con recursos humanos para la limpieza de montes en invierno, lo que generaría empleo en el medio rural". "Es lamentable la situación de abandono de nuestros montes, acumulando gran maleza que es puro combustible", detallaron.
De esa forma, UPA llamó la atención sobre la necesidad de articular también más medios de extinción para frenar el desarrollo de grandes incendios. "Hacen falta más medios aéreos, materiales y humanos para frenar estos incendios de nueva generación", así como contar con la población rural en las tareas de prevención y de extinción, aseveraron.