Continúa la guerra abierta entre Bruselas y los profesionales del campo, también en Castilla y León, por la nueva normativa de la PAC aplicable a los cultivos.
En este caso es la Unión de Campesinos de Castilla y León (UCCL) la que pide al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación que dirige Luis Planas, que medie para que se imponga "la sensatez" y se permita eliminar las malas hierbas de los cultivos de forma mecánica, que es como se ha venido haciendo siempre.
La ausencia de lluvias de febrero a prácticamente todo el mes de junio y la concentración en el sexto mes del año de grandes precipitaciones ha hecho que crezcan de forma desorbitada las malas hierbas que perjudican las cosechas.
De "aberración agronómica" califica Jesús González Palacín, coordinador de UCCL, la medida medioambiental impuesta desde Bruselas "por ignorancia pura y dura", que impide a los agricultores realizar labores mecánicas para la eliminación de malas hierbas y que apuesta por la utilización de herbicidas.
Palacín explica que cuando se realiza esta eliminación de malas hierbas de forma mecánica y sin utilizar fuertes fitosanitarios, "se consigue conservar más humedad vital para el otoño en la tierra", lo cual beneficia los cultivos.