La fábrica de Motores de Renault anuncia que suprime el medio turno de la línea diésel k9 L2 por una caída de la demanda de los vehículos propulsados por este derivado de combustión fósil.
Así lo ha trasladado la Comisión Negociadora en un comunicado de CCOO en el que se refleja su preocupación tras la reunión mantenida con la dirección de Motores en Valladolid.
La supresión de este medio turno afectará a 91 trabajadores a partir del 18 de abril donde se eliminará la rotación pasando a prestar sus servicios en el turno fijo de mañana, y reduciendo la producción a casi cinco mil motores semanales.
En este sentido, CCOO espera que la empresa "respete las condiciones y conciliaciones familiares que tenían antes de la supresión los trabajadores que están afectados por esta medida".
Desde este sindicato esperan se cumpla el plan industrial firmado el año pasado que prevé que en esta planta de Valladolid se fabrique un nuevo motor híbrido.
Agenda 2030
La obligación de implantar nuevos modelos de movilidad sostenible que implican que en 2035 no se puedan vender en la Unión Europea vehículos de gasolina ni diésel ha provocado una caída en la demanda de estos coches en esta industria.
"En una reunión reciente trasladamos a Miguel Ángel Bustamante, diputado de Izquierda Unida, una comisión de industria del Congreso para que la transición a un modelo de producción libre de emisiones fuera justa y las empresas y los trabajadores pudiéramos adaptarnos sin poner en peligro los puestos de trabajo". Sin embargo, la Agenda 2030 continúa su calendario para cumplir los objetivos de descarbonización marcados por la Unión Europea.
Además, el propio José Vicente de los Mozos, ha solicitado en varias ocasiones que se reactive la Mesa de la Automoción, sin respuesta aún por parte del Ministerio de Industria. España, es el segundo productor de automóvil de la Unión Europea.