Finalmente, no pudo ser. Tras casi un año de negociaciones para aplicar un Plan de Mejora de la Competitividad y ante la falta de acuerdo con el comité de empresa para reflotar los números de Cerealto Siro, la compañía ha anunciado el cierre de su planta ubicada en Venta de Baños.
Los representantes de los trabajadores mantendrán hoy una nueva reunión en la que se abordarán las indemnizaciones y la posibilidad de que la plantilla pueda trasladarse a otras plantas que la gigante cerealista tiene en Castilla y León.
Según ha podido saber este periódico, el traspaso se producirá de forma progresiva en los próximos 24 meses y conlleva la recolocación del 100% de la plantilla en otras fábricas del grupo en Castilla y León, que actualmente asciende a 197 personas.
Este traspaso, tal y como apuntan fuentes de Siro, se enmarca dentro del Plan de Competitividad que la Compañía continúa negociando con los representantes de los trabajadores de esta fábrica de galletas de Venta de Baños, y que es "requisito indispensable para la entrada del socio inversor y única salida a la situación financiera que atraviesa la empresa", que arrastra una deuda de 299 millones de euros.
Para quienes no opten por la recolocación en otras plantas del Grupo, está previsto aplicar las condiciones acordadas entre ambas partes en la reunión que mantuvieron con el SERLA el pasado 10 de marzo.
En las últimas semanas la Compañía ha alcanzado un preacuerdo con los comités de empresa de la planta de Aguilar de Campoo, que ha sido ratificado por amplia mayoría por los colaboradores de dicha planta, y los Centros Especiales de Empleo para la puesta en marcha del Plan de Mejora de la Competitividad, con los que está pendiente retomar las votaciones para su aceptación. Por su parte, el comité de empresa de Toro tiene previsto someter el acuerdo a votación en Asamblea hoy 31 de mayo.
Según fuentes de Cerealto, la planta de Venta de Baños tiene un coste salarial un 29% superior al resto de plantas que la Compañía tiene en España y un nivel de absentismo laboral del 18,2% sobre una media del 6% en Castilla y León. Datos que suponen un lastre para la competitividad de la planta palentina.
Las claves de la negociación
En estos momentos la empresa se encuentra negociando con el comité de empresa las condiciones de este traslado, mientras los representantes de los trabajadores insisten en que los datos de absentismo laboral y de coste salarial por encima de la media "son mentira".
Unas cifras que la Compañía sitúa en un 29% más en lo que respecta al pago de salarios y en un de absentismo laboral del 18,2% sobre una media del 6% en Castilla y León.
Las condiciones que Cerealto Siro ha compartido hoy con el comité de empresa pasan por el traslado progresivo de los trabajadores en los próximos 24 meses, el compromiso de recolocar al 100% de la plantilla con las condiciones salariales actuales de la planta de destino.
En este sentido, y si hubiera diferencias salariales tras la recolocación, Cerealto Siro indemnizará la diferencia con 45 días por año trabajado, sin tope.
Además, se prevé el abono de 33 días por año trabajado con un máximo de 20 mensualidades a las salidas voluntarias, según lo acordado con el comité de empresa en el SERLA el pasado día 10 de marzo.
Davidson Kempner y Afendis Capital Management
Tras anunciar el pasado mes de diciembre que Biscuit International entraría como accionista de Cerealto Siro, las negociaciones dieron un giro de 180 grados tras conocerse en marzo de este año que finalmente serían Davidson Kempner y Afendis Capital Management los fondos de inversión que se harían cargo del 75% de la empresa castellano y leonesa con una inyección de 80 millones de euros.
La entrada de este socio inversor como accionista mayoritario de la Compañía está condicionada a la firma del Plan de Competitividad que debe cerrarse en los próximos días, y, que, de no producirse, implicará la retirada inmediata de la oferta por parte del socio inversor.
La compañía se había marcado como objetivo para 2022 cerrar con un EBITDA recurrente de 20,5 millones de euros, afianzar definitivamente la sostenibilidad financiera, asegurar la confianza de los clientes y recuperar su posicionamiento en el mercado.
Pero todo ello pasaba por llegar a un acuerdo con el comité de empresa para aplicar un Plan de Mejora de la Competitividad que hiciera atractivo y viable el proyecto para los inversores. Un plan que aún no ha llegado a buen término por lo que la compañía ha decidido cerrar su planta de Venta de Baños, en la que trabajan actualmente 197 personas.
Cerealto Siro Foods da empleo actualmente a 1.700 personas en Castilla y León, de las cuales casi el 17% presentan algún tipo de discapacidad o se encuentran en riesgo de exclusión social.