feria medieval 2018 sabado moncorvo (57)

feria medieval 2018 sabado moncorvo (57)

Portugal

En Torre de Moncorvo no cabe un alma en su Feria Medieval

15 abril, 2018 05:39

Torre de Moncorvo baja este domingo el telón de su Feria Medieval, ya entrada la tarde por las tierras del Douro Vinhateiro, con una muchedumbre disfrutando de actuaciones, puestos de ventas y refrescando el paladar con una cerveza o bien una ginginha. Esta ha sido una de las características que han marcado esta edición de 2018, el buen tiempo con temperaturas típicas de Primavera y, más, cuando los días y semanas anteriores pasaron marcadas por la lluvia, el frío y las borrascas que llegaban una tras otra. Unas temperaturas agradables que provocaron la asistencia de miles de visitantes.

Torre de Moncorvo, ese hermoso municipio que saluda al Duero desde la ladera, sigue su historia festiva. Es la magia de la noche y el ritual del fuego con 'Alchemia', y la magia de los artesanos iluminados entre penumbras por la tenue luz del fuego de carbón mineral. Y también la música que se pierde entre colinas. Melodías de unos y de otros, porque, por haber, hay grupos con músicas y trovas para todos estilos y gustos. Es la noche medieval…

Este sabádo, de calurosa temperatura y el municipio lleno hasta ‘la bandera’, también hay momentos para la música -que no falta en ningún instante ni rincón-, para un buen almuerzo en las tasquinhas del Burgo del Concejo. Y, ya por la tarde, con más visitantes que nunca -por cierto, una gran cantidad de españoles, sobre todo de la vecina Salamanca y Valladolid- tuvo lugar bautismo real. El momento de bautizar al que fuera rey D. Afonso IV de Portugal hijo de D. Dinis y la infanta Isabel de Aragón, conocida como Santa Isabel.

Cantigas de amor, cantigas de Amigo y cantigas de Escarnio e Maldizer… Son los cantos de D. Dinis en letra, porque también fue poeta. Es la visita real de D. Dinis a Terras Transmontanas. Es la recreación de los cortejos de llegada, de despedida, nacimiento y bautismo real, juramentos, concesiones regias a los habitantes de Moncorvo, audiencia a los pobladores y, cómo no, justas y torneos en su honor.

El inmenso plató en que se ha convertido el centro histórico de Torre de Moncorvo es el exponente de cuando las cosas públicas se organizan con cabeza, ideas y convencimiento, el resultado está en la misma esquina. Es la Feira Medieval de Torre de Moncorvo, que se ha hecho un hueco más que importante en el conjunto de ferias medievales de Portugal, siendo la que abre el calendario de ferias.

Para la medianoche queda la magia y el terror. La penumbra que distinguía esta época de miedos y terrores… Hablamos de hechizos, brujas, brujería y demonios… y de por medio, la Santa Inquisición.

Torre de Moncorvo es el majestuoso balcón que mira al Duero y sus laderas. Es abrir la ventana y, desde el balcón, observar viñedos, palomares, almendros y olivos y, al fondo, casi como lamiendo el balcón, el Duero que baja parsimonioso. Y, de repente, por la curva aparece un crucero. Son las tierras también mágicas del Douro Vinhateiro, Patrimonio Mundial de la Unesco, sobre el que el viajero volverá para hablar de gastronomía, turismo y vino.

REPORTAJE GRÁFICO LUIS FALCÃO