Espectáculo en el cielo y fiesta en la tierra de Mogadouro
Mogadouro, fiel a su cita cada último sábado del mes de julio, celebró su ya tradicional Red Burros Fly-In que se ha convertido en un clásico dentro de las exhibiciones y festivales de vuelo en un espectáculo único en el cielo y fiesta en la tierra.
Ello en la freguesía de Azinhoso, en Mogadouro, a escasos kilómetros de la frontera y una de las ciudades portuguesas más cercanas a Castilla y Leon, que celebró esta tarde de sábado uno de los principales festivales aéreos de la Península Ibérica. Es el conocido ‘RedBurros Fly-In’, en el que han participado cerca de 100 aeronaves de diversos modelos y tipos y procedencia. Además, contó con la presencia de cientos de visitantes.
Tras los paracaidistas, y ya con la apertura a cargo del presidente de la Cámara Municipal de Mogadouro, Francisco Guimarães, quien estuvo acompañado por el presidente de la Câmara Municipal de Miranda do Douro, Artur Nunes, y del presidente de la Asamblea Municipal, Jorge Martins, dio la bienvenida a los presentes y agradeció la coloboración del Ejército de Portugal, así como de asociaciones aéreas, Bomberos, Emergencias, y demás colaboradores, y Gina Gomes siempre atenta y coordinando todo el acontecer junto al diretor del Aeródromo Municipal de Mogadouro (AMM), João Corredeira, siguió la espectacularidad.
Variedad de areonaves en los angares y también a exhibición en las zonas de las pistas, acrobacias, desfile aéreo y también hubo momentos para el bautismo de vuelo y convivencian en las barras de las tasquinhas para ‘matar’ el calor con una cerveza o una botella de agua.
Ya en términos tecnológicos, este festival aéreo de Mogadouro comienza a ser centro para demostraciones de los avances más modernos que se realizan en la Península Ibérica en términos aeronáuticos, explica João Corredeira.
Como dato curioso decir que es el 9º año consecutivo en que el Aeródromo Municipal de Mogadouro acoge el Festival Aéreo “RedBurros Fly-In”. El nombre ‘RedBurros Fly-In’ fue inspirado por la tradicional fiesta del burro que tiene lugar todos los años en la aldea de Azinhoso, ya que el aeródromo está situado en su término. Como también destacar la comida, campestre a la orilla de una ribera, y con sabores y productos de primera calidad. Es la zona húmeda del Moinho de Penas Roias, con la torre del que fuera un estratégico castillo haciendo de guía y vigía.
Un festival aéreo que da paso a las fiestas de la Ciudad en honor a Nossa Senhora do Caminho, del 5 al 28 del mes de agosto, aunque el ‘plato fuerte’ va del 23 al 28, pero eso es letra y música para otra canción, cachis!
FOTOS LUIS FALCÃO