Las muertes ya duplican a los nacimientos en una despoblada Salamanca

El Instituto Nacional de Estadística (INE) ha publicado los datos del primer semestre de este año 2017 correspondientes a los movimientos naturales de población. Cifras de nuevo negativas para la provincia de Salamanca, que confirman el envejecimiento demográfico y la despoblación.

Entre enero y junio se registraron 2.182 muertes, doscientas más que el periodo anterior. De seguir este ritmo, se superarán las 3.973 del año 2015 que hasta ahora marcan el récord. Y es que, como puede apreciarse en el gráfico adjunto, desde hace dos décadas las defunciones registran una continua oscilación, pero siempre por encima de las 3.500 en una provincia de Salamanca donde hay casi 80.000 pensionistas.

Por su parte, los nacimientos fueron 1.007 entre enero y junio, menos que el periodo anterior. De seguir este ritmo, se superará el récord negativo del año pasado, establecido en 2.238 alumbramientos. Y es que, como detalla el gráfico adjunto, la natalidad ha ido descendiendo paulatinamente, con el único pico al alza entre los años 2005 y 2008 debido a los nacimientos de emigrantes antes de estallar la crisis económica.

De hecho, Salamanca es la séptima provincia de España con la menor tasa de natalidad, un 6,6%, sólo por delante de Asturias, Lugo, Orense, León, Palencia y Zamora. De esta forma, al comparar los nacimientos con las muertes, se registra un crecimiento vegetativo negativo de 1.175 personas. Descenso de población que, junto con la fuerte emigración, explican la continua pérdida de habitantes en territorio charro.

Y es que Salamanca es una población cada vez más envejecida, que ha perdido veinte mil habitantes durante la última década, para quedarse con apenas 333.000 empadronados. Actualmente hay 63.984 residentes entre 15 y 35 años, el periodo de edad que oficialmente se considera como juventud. Son dos mil cien menos que hace un año, mientras que los mayores de 65 años se han incrementado en trescientos, hasta los 87.014 salmantinos. Dentro de este periodo de vejez, cada vez hay más mayores de ochenta años, 34.562 (ochocientos más), cada vez más cerca de la cantidad de niños, los menores de quince años, 39.848 empadronados (cuatrocientos menos).