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Región

La posible pena por acuchillar a un varón por sus ronquidos

13 mayo, 2018 16:37

La Audiencia de Valladolid celebra juicio el miércoles y jueves próximos contra un joven con iniciales B.Z.S. que en febrero de 2017, cuando se hallaba alojado en un centro de integración, acuchilló a otro residente porque, según alegó entonces a la policía, le molestaban los ronquidos de la víctima.

El presunto autor de los hechos, extranjero y con 21 años por aquel entonces, se enfrenta a una posible condena de diez años de prisión por un delito de asesinato en grado de tentativa y, alternativamente, a cinco años de privación de libertad por un delito de lesiones con empleo de instrumento peligroso, junto con la obligación de indemnizar al Sacyl con 2.345 euros por los gastos de asistencia a la víctima, según informaron a Europa Press fuentes jurídicas.

Los hechos se produjeron sobre las 02.30 horas del día 17 de febrero de 2017 cuando el acusado se encontraba en una de las habitaciones del 'Centro Reto', sito en el Camino Viejo de Renedo. En ese momento, B.Z.S. se acercó al lesionado, M.A, de 60 años, aprovechando que se encontraba dormido, y le asestó al menos tres puñaladas con un cuchillo cebollero de 23 centímetros de hoja.

"¡Alguien tenía que morir!"

Los gritos de la víctima llevaron a otro de los ocupantes de la habitación a encender la luz, ante lo cual el supuesto agresor optó por marcharse mientras profería expresiones del tipo "¡ya está!", "¡la paga del pecador es la muerte!" y "¡alguien tenía que morir!".

El procesado fue posteriormente detenido por la policía. Entonces justificó su agresión en que no soportaba más los ronquidos de su compañero de habitación.

A consecuencia de las cuchilladas recibidas, M.A. sufrió distintas lesiones y secuelas en el brazo y mano izquierdos y la región axilar, así como numerosas cicatrices. La víctima tuvo que ser intervenida y tardó en curar 124 días.

En su escrito de calificación de los hechos, la acusación pública considera probado que por aquellas fechas el encausado presentaba un trastorno de dependencia del cannabis, abuso de diversas sustancias sobre la base de personalidad de 'cluster B' y alteración leve de su capacidad intelectiva y volitiva.