La posible condena por clavar un machete a su primo
Fiscalía de Valladolid solicita, con carácter provisional, una condena de 4 años de prisión para un vecino de la localidad de Ramiro, F.M.G, por delito de tentativa de homicidio en la persona de su primo, R.H.M, a quien en agosto de 2017 clavó un machete tipo militar a la altura del abdomen y le causó graves lesiones.
La acusación pública considera que los hechos son constitutivos de un delito de tentativa de homicidio en el que concurren la eximente incompleta de anomalía psíquica del condenado y la agravante de abuso de superioridad, por lo que solicita cuatro años de privación de libertad--la acusación particular pide cinco--y además, como medida de seguridad, su internamiento psiquiátrico por espacio de ocho años, que el acusador particular eleva a diez.
Además, las acusaciones pública y particular plantean también la prohibición de aproximarse o comunicar con la víctima por espacio de nueve y diez años, respectivamente, junto con el abono en favor de la víctima, por el mismo orden, de indemnizaciones por importe de 10.600 y 11.336 euros.
La defensa pide libertad vigilada
Frente a ellos, la defensa del procesado tipifica los hechos como un delito de lesiones, con la eximente incompleta de anomalía psíquica, y conforme a ello solicita un fallo absolutorio respecto del delito de tentativa de homicidio y la imposición, como medida de seguridad, de cinco años de libertad vigilada y la privación del derecho a la tenencia y porte de armas durante el mismo periodo.
Durante la vista, que tendrá por escenario la Sección Cuarta de lo Penal de la Audiencia Provincial, se analizará lo ocurrido sobre las 23.00 horas del día 5 de agosto de 2017, fecha en la que el acusado, F.M.G, de 45 años, se hallaba sentado a la puerta de su domicilio en la localidad de Ramiro cuando pasaron por allí su primo y vecino colindante, R.H.M, junto con su esposa y la hija de ambos, de 3 años.
Fue entonces cuando el acusado, que mantenía malas relaciones con la víctima, comenzó a proferir gritos del tipo "¡hoy voy a matar a alguien, os voy a matar!", ante lo cual su primo se enfrentó a él recriminando su comportamiento y el primero sacó del pantalón un cuchillo tipo machete de imitación militar, con una hoja de 14 centímetros, que le clavó a la altura del abdomen.
La herida de arma blanca, que según las acusaciones tenía intención homicida, causó a la víctima una perforación en la cara anterior gástrica que requirió de intervención quirúrgica, sin la cual el lesionado podría haber perdido la vida, según coinciden los dos acusadores.
Con el cuchillo a quirófano
Con anécdota, el cuchillo empleado en la agresión fue intervenido por la Guardia Civil una vez que el mismo fue extraído por el cirujano del cuerpo de la víctima.
El acusado, al que se había impuesto en sentencia firme en 2015 una medida de libertad vigilada durante cinco años por delito de lesiones, padecía un trastorno por ideas delirantes que disminuyó mucho sus facultades intelectivas y volitivas en el momento de ocurrir los hechos.