Final de fiesta bestial en la Acera de Recoletos para los futbolistas del Real Valladolid a los que el cansancio del partido de ayer y todas las citas protocolarias que han tenido que afrontar les han pasado poca factura, por la visto esta tarde.

Tras llegar en autobús a la Plaza Zorrilla y recibir de nuevo el cariño del alcalde, Óscar Puente, y del concejal de Deportes, Alberto Bustos, los jugadores se han venido literalmente arriba en la Acera Recoletos.

Hasta Toni, ese tímido pelotero que parece no romper un plato ha hecho bromas y se ha mostrado cómplice con una afición que quería más fiesta todavía de la que llevaba encima (la noche de ayer fue larga).

Con bromas varias y cánticos como el "Mata quédate" y ese "Vamos mi Pucela, vamos campeón", la capital del Pisuerga ha rugido de lo lindo para volver a decir a toda España que estará en Primera División la próxima temporada.

Los Cristiano, Messi, Griezmann y compañía pasarán por Zorrilla para enfrentarse a un equipo que ha vuelto a encontrar esa sintonía tan necesaria con su afición.