Mensaje de Navidad del Rey Felipe VI: convivencia sin rencor
El Rey Felipe VI ha hecho este lunes un llamamiento a asegurar la convivencia, por considerar que es "el mayor patrimonio" de los españoles y advirtiendo de que la convivencia "siempre es frágil" y de que su mantenimiento "exige el respeto" a la Constitución. Una Constitución, ha dicho, "que no es una realidad inerte, sino una realidad viva que ampara, protege y tutela" los derechos y libertades.
El jefe del Estado ha dirigido a los españoles un mensaje de Navidad, el quinto de su reinado, enmarcado en el 40 aniversario de la Carta Magna y en los valores que la inspiraron, y dirigido especialmente a los jóvenes y con quien, según su análisis, la sociedad tiene "una deuda pendiente".
De hecho, ha incidido en la convivencia como "la obra más valiosa" de la democracia española y pero también como "el mejor legado" para las generaciones más jóvenes. "Debemos evitar que se deteriore o se erosione; debemos defenderla, cuidarla, protegerla; y hacerlo con responsabilidad y convicción", ha dicho, recordando que así ha sido posible "durante estos últimos cuarenta años de libertad" porque los españoles han creído en sí mismos y en sus "propias fuerzas".
La convivencia, ha argumentado también, se basa "en el respeto a las personas, a las ideas y a los derechos de los demás", requiere reforzar los vínculos que unen y deben seguir uniendo a los españoles, y además es "incompatible con el rencor y el resentimiento". "Estas actitudes forman parte de nuestra peor historia y no debemos permitir que renazcan", ha dicho, para recalcar que, en convivencia, "la superación de los grandes problemas y de las injusticias nunca puede nacer de la división, ni mucho menos del enfrentamiento, sino del acuerdo y de la unión ante los desafíos y las dificultades".
Ha sido un discurso en el que no ha mencionado la palabra Cataluña, a diferencia del mensaje de 2017, pronunciado solo tres días después de las elecciones en esa comunidad y cuando aún no habían pasado tres meses del 1-O.
Felipe VI ha comenzado dirigiendo sus palabras a quienes viven "una situación difícil por razones personales, económicas y sociales" y expresando "repulsa y enérgica condena" contra la violencia machista" y acto seguido ha pasado a hablar de la convivencia, "pensando en el presente y también en el futuro", en los jóvenes.
También ha llamado a "valorar con orgullo" lo construido entre todos y a confiar en lo que se puede hacer en el futuro "alejando el desencanto y el pesimismo", siendo conscientes de "la nueva realidad" del siglo XXI y siendo capaces de "alcanzar consensos cívicos y sociales que aseguren el gran proyecto de modernización de España".
Hacer a los jóvenes partícipes de la Transición
De hecho, ha apelado a hacer a los jóvenes "partícipes" del periodo de la Transición, porque es el que permite entender cómo y por qué España "ha conseguido el cambio más radical de su historia". "Yo creo que eso es necesario, sí; pero también ha pasado a la primera persona para dirigirse a un juventud con quien, ha opinado, la sociedad tiene "una deuda pendiente": "Somos responsables de su futuro y las circunstancias de hoy en día no son, ni mucho menos, las más fáciles".
"Queréis vivir y convivir, pero tenéis problemas serios", ha reconocido el Rey, tras remarcar que la sociedad actual suma tanto "interrogantes" como "oportunidades" y que los jóvenes tienen talento, creen en la paz, se sienten europeos y son solidarios. "Os tenemos que ayudar", ha dicho, tanto a quienes necesitan una mejor formación como a quienes tienen un trabajo que no responde a sus expectativas, para que puedan "construir un proyecto de vida personal y profesional, con un trabajo y un salario dignos", un lugar adecuado donde vivir y, si lo desean, formar una familia y poder conciliar la vida personal con la familiar.
Así, ha situado como responsabilidad de toda la sociedad contribuir a que toda esa capacidad y energía "venzan a las dificultades" y "seguir construyendo día a día un país mejor, más creativo, más dinámico, y siempre en vanguardia". "Una España más cohesionada socialmente y más comprometida con la igualdad real entre hombres y mujeres", ha remachado.
El Rey ha finalizado su mensaje haciendo un llamamiento a todos a actuar "por el bien común", haciendo cada uno lo que le corresponde, "animando a quien lo precisa _sin que nadie quede atrás_". "Sumando todas nuestras fuerzas en el deseo de una España siempre mejor, porque los españoles lo merecemos", ha concluido, antes de despedirse felicitando la Navidad en todas las lenguas oficiales".