La raíz madre es la que se mantiene. Partido Popular y Vox cogobiernan en la Junta de Castilla y León y lo hacen con tiras y aflojas, pero como asegura el portavoz de la Junta, Carlos Fernández Carriedo, “confirmando todos los puntos del pacto” que se firmaron el pasado mes de abril. Sin embargo, no ocurre así en algunos lugares donde las dos formaciones comparten ayuntamientos desde las pasadas elecciones municipales de 2019. Comenzaron cinco gobiernos en toda la Comunidad: Palencia, Tordesillas, Aranda de Duero, El Espinar (Segovia) y Navalmoral de la Sierra (Ávila), y ahora solo se mantienen dos.
Ayer se conoció la ruptura en el ayuntamiento vallisoletano de Tordesillas entre el Partido Popular y Vox, uno de los tres que sobrevivían. El motivo fue “el incumpliendo de los acuerdos de gobierno y el veto al que la formación se ha visto expuesto por parte del Partido Popular (PP)”.
El Español Noticias de Castilla y León se ha puesto en contacto con los alcaldes de los dos pueblos supervivientes al pacto PP-Vox y allí hay “tranquilidad”. En la localidad abulense de Navalmoral de la Sierra, de tan solo 330 habitantes, hay un tripartito atípico, PP, Vox y…PSOE. “Pero no tenemos ningún problema, porque lo hacemos todo pensando en los vecinos”, afirma el edil Desiderio Vallejo, del PP. Acaba de enterarse de la ruptura en Tordesillas, pero tiene claro que en su pueblo esto no va a pasar. “No tenemos ningún problema con ellos, aquí el único que los da es el concejal de Podemos”, comenta en tono jocoso. Vallejo saca pecho y recuerda que en los pueblos “las personas están por encima de las siglas, tenemos que entendernos por el bien de todos” y confirma que no ha recibido ninguna “orden de arriba” para controlar sus acuerdos en el Ayuntamiento. Ahora su intención es llegar a las elecciones del próximo mes de mayo.
Por su parte, en El Espinar (Segovia) en las municipales de 2019 el PSOE fue la lista más votada, con cinco concejales; seguida de PP, con cuatro, y Vox, con dos. Ciudadanos e Izquierda Unida consiguieron un edil respectivamente. Podemos se quedó en blanco. El PP alcanzó un acuerdo de gobernabilidad con Vox y Cs para la legislatura 2019/2023, que está presidido por el candidato popular Javier Figueredo, que en más de una ocasión se ha referido a que "están condenados a entenderse". Este periódico se puso en contacto con él, pero desgraciadamente no le devolvió la llamada. Aquí, en El Espinar, incluso ya se superó la crisis de Gobierno de la Junta entre PP y Ciudadanos.
Casos anteriores
El de Tordesillas no es el único caso de coalición rota. La más sonada fue en Palencia en diciembre de 2021 cuando la única edil de Vox en el ayuntamiento, Sonia Lalanda, que facilitó el Gobierno del PP y Cs en ese consistorio, se descolgó de ese Ejecutivo municipal dimitiendo de la Concejalía de Agencia de Desarrollo Local para quedarse en la oposición, ya que entiende que ambos partidos han dejado de ser "un socio fiable". En Palencia siguen azules y naranjas gobernando, que han sobrevivido a la ruptura de ambos el pasado diciembre.
En Aranda, tras dos años de tira y afloja, Vox decidió romper con el Ayuntamiento de Aranda de Duero y salir de la Junta de Gobierno Local. “Seguiremos llegando a acuerdos, presentando proyectos e iniciativas, pero desde un punto más diferenciado e independiente”, anunció en diciembre del año pasado el portavoz, Sergio Chagartegui. El concejal de Vox se comprometió a seguir “apoyando al equipo de gobierno para lo que sea estrictamente necesario y positivo para los vecinos de Aranda de Duero y en aras de no frenar la gobernabilidad, funcionamiento y avance de la ciudad”.