Toda la comunidad autónoma de Castilla y León entra desde las 13.00 horas de mañana en aviso amarillo por altas temperaturas, que podrían llegar a alcanzar los 38 grados de máxima, a excepción de la provincia de León, según refleja la previsión realizada por la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) y recogida por la Agencia Ical.
Dicha predicción indica que los lugares más afectados de la Comunidad, y que podrían llegar a esos 38 grados de temperatura máxima, son el sur de la provincia de Ávila, el norte de Burgos y el sur de Salamanca.
Los termómetros podrían alcanzar, con entre un 40 y un 70% de probabilidad, los 36 grados en las mesetas de Ávila, Burgos, Palencia, Salamanca, Segovia, Soria, Valladolid, Zamora y el Condado de Treviño, mientras que en 34 grados fija la máxima la Aemet para el Sistema Central en Ávila, Salamanca, Segovia y Soria, la cordillera Cantábrica en Burgos, y la Sierra Ibérica en esta última provincia y Soria.
Aunque el aviso se desactiva a las 20.59 horas de mañana, se reactivará el lunes también entre las 13.00 y las 20.59 horas, con termómetros que podrían alcanzar los 37 grados en el sur de Ávila y Salamanca y en las mesetas de Ávila, Burgos, Palencia, Salamanca, Segovia, Soria, Valladolid y Zamora, mientras que la máxima será de 35 grados en el Sistema Central en Ávila, Salamanca, Segovia y Soria y en la Sierra Ibérica en esta última provincia y en la de Burgos.
Para evitar sustos, la Agencia de Protección Civil y Emergencias recomiendan evitar las actividades al aire libre entre las doce de la mañana y las seis de la tarde, así como estar más pendiente de personas con perfiles de riesgo como mayores o pacientes con enfermedades crónicas (hipertensión, cardiopatías, diabetes...) a la vez que extremar la precaución en menores de cinco años.