En 2023 entró en vigor una de las medidas que ha generado más polémica de aquellas que están dentro de la Ley del Cambio Climático y Transición Energética. En concreto, se trata de la creación de Zonas de Bajas Emisiones en todas las localidades españolas que tengan más de 50.000 habitantes. Aunque también se incluyen los territorios insulares y aquellos municipios con más de 20.000 habitantes que superen los niveles de contaminación permitidos. Los ayuntamientos todavía estudian las zonas y su implantación. Sin embargo, la DGT y el Ministerio del Interior ya avisan de que el próximo año comenzarán a controlar su cumplimiento, incluso bajo amenaza ya de nuevas multas-
En Castilla y León esta norma afecta a ocho capitales de provincia y a Ponferrada. Solo Soria como capital se salva al no llegar a la cifra de habitantes. Esta medida es para evitar el aumento de la temperatura que está originando el famoso cambio climático. Una religión para algunos, la gran mentira para otros. España pretenden cumplir la normativa marcada por la Unión Europea en cuanto a la necesidad de cumplir con las obligaciones establecidas en materia de clima y desarrollo sostenible e inclusivo, de ahí que muchos Ayuntamientos hayan tenido que amoldarse a la nueva situación. Así, las capitales de Ávila, Burgos, León, Palencia, Salamanca, Segovia, Valladolid y Zamora, junto a la localidad de Ponferrada son los nueve municipios que deberán tener ZBE.
Las prohibiciones o restricciones de acceso afectarán a los vehículos que más contaminan, que son aquellos que no tienen pegatina medioambiental de la DGT. En El Español Noticias de Castilla y León ya te contamos cuáles podrían hacerlo y cuáles no. Aunque todavía no se está multando, el 1 de enero del próximo año será ya cuando se comience a hacer. Según la reforma de la Ley de Tráfico que entró en vigor el 21 de marzo de 2022, la multa por entrar en una zona prohibida o restringida para la etiqueta de nuestro vehículo es de 200 euros. Aunque la Zona de Bajas Emisiones es una obligación normativa europea, su tamaño puede ser determinado por las distintas instituciones
Sin embargo, las elecciones municipales del pasado 28 de mayo han supuesto un antes y un después en estas normativas para las ZBE. Los ayuntamientos gobernados por el PSOE siempre han presumido de esta medida y de evitar que los coches pasen al centro. Sin embargo, en los que ahora gobierna el PP, por ejemplo Valladolid o Segovia, ya han dicho que la zona se reducirá a la “mínima expresión” que marque la normativa.
Etiquetado
Hay que recordar que el etiquetado contempla cuatro categorías, es decir, cuatro etiquetas diferentes. La 0 emisiones es la de los vehículos más eficientes y es para los eléctricos. La siguiente es la eco, que engloba vehículos híbridos, de gas o ambos. La C reconoce a los vehículos de combustión (diésel o gasolina) que cumplen con las últimas emisiones euro, es decir son matriculados después de enero de 2006, y los de diésel matriculados después de enero de 2015. Finalmente, la B corresponde a aquellos diésel o gasolina antiguos (matriculados desde enero de 2001, y los de diésel matriculados a partir de enero de 2006). Pues bien, cada ciudad está imponiendo sus normas, pero con estas reglas hay que jugar. Y lo que está claro es que los coches de gasolina anteriores a 2001 y los de gasoil anteriores a 2006, son considerados como muy contaminantes y no pueden portar etiqueta de la DGT. es decir, no podrán entrar en el juego de las ZBE.