Castilla y León es una comunidad líder en micoturismo. La Comunidad cuenta en sus bosques con una gran variedad de hongos silvestres, habiéndose llegado a catalogar 2.700 especies, muchas de ellas comestibles. De ese total, más de 50 se pueden comercializar, lo que ha contribuído a generar una gran riqueza en un territorio en el que el esmero de guías, productores y cocineros ha impulsado la afición por la recogida de setas.
La estación de otoño es especialmente propicia para la búsqueda de estos hongos silvestres. La bajada de las temperaturas y el aumento de la lluvia propician la aparición de las setas y los aficionados al micoturismo en la Comunidad recorren los bosques con la esperanza de encontrar alguna de las miles de especies presentes en Castilla y León. Pero hay que tener precaución, ya que no todas ellas son comestibles.
Es fundamental para el aficionado y para la persona curiosa que se adentre en la afición del micoturismo saber exactamente qué setas puede o no recoger, conociendo aquellas que son venenosas y que pueden llegar a ser potencialmente mortales. Muchas de ellas, además, son especialmente frecuentes en Castilla y León.
Amanita phalloides
Conocida como 'el hongo de la muerte', es una de las setas más peligrosas y está presente en los bosques de Castilla y León. Comerla puede llegar a implicar que se produzcan fallos en el hígado y los riñones y, en muchos casos, llega a provocar la muerte de aquel que la consume.
Uno de los mayores peligros de este hongo es la lentitud en su acción nociva, ya que provoca que muchos médicos no logren diagnosticar el origen del problema del paciente, lo que la ha convertido en la principal responsable de una gran parte de las muertes por intoxicación con setas.
Amanita muscaria
La 'Amanita muscaria' provoca fuertes dolores digestivos y diarrea poco después de consumirla y es muy peligrosa. Este hongo, que también está muy presente en la Comunidad, es utilizado en ocasiones como alucinógeno, pero un consumo en grandes cantidades puede provocar el coma.
Las setas de la familia de las amanitas son especialmente habituales en los bosques de hoja ancha y sus efectos se inician unas 10 horas después de haberse consumido. En un inicio, se producen vómitos, náuseas y diarrea, pero unos días después puede llegarse a una afectación severa tanto hepática como renal, al coma y al fallecimiento.
Gyromitra esculenta
Este peligroso hongo puede llegar a ser mortal si se consume crudo o poco cocinado. Una ventaja de esta seta es que es fácilmente reconocible debido a su característica forma de cerebro y a su superficie en forma curvilínea.
A las pocas horas de ser ingerida, causa en el que haya cometido la temeridad de hincarle el diente vómitos, dolor abdominal y náuseas, llegándose posteriormente a la afectación del sistema nervioso con incoordinación, convulsiones, debilidad, delirio y coma. También se produce por su ingesta en ocasiones una afectación renal y hepática, y a veces, se destruyen células rojas y se producen alteraciones en la cesión del oxígeno a los tejidos.
Galerina marginata
Es una especie especialmente peligrosa, y muy presente en Castilla y León. Cuenta con aspecto de alfa-amanitina, que se trata de un péptido no ribosomal cíclico que cuenta con ocho aminoácidos, especialmente letal. Hay que evitar comerla en cualquier caso.
Este hongo crece en las ramas y troncos secos de los pinos y las consecuencias clínicas son similares a las de la 'Amanita phalloides'. Los síntomas de intoxicación aparecen entre siete y 48 horas después de la la ingesta, con una clínica inicialmente digestiva, a la que le sigue una afectación hepática y una insuficiencia renal en la fase final.
Lepiota brunneoincarnata
El gran peligro de este hongo, además de su carácter mortal, es que se puede confundir fácilmente con setas que sí que son comestibles. Es fundamental, en el caso de esta especie, medir el diámetro de la seta: cuando no supera los ocho centímetros se puede comer.
Entoloma sinuatum
También se puede confundir con facilidad con setas comestibles y eso ha llevado a que se consagre como uno de los hongos con los que más habitualmente se producen intoxicaciones. Algunos de sus síntomas más habituales son la diarrea intensa y los vómitos.
Cortinarius orellanus
Se trata de un hongo rico en orellanina y es también engañosa, ya que no aparecen síntomas hasta pasadas 48 o 72 horas. Las consecuencias más habituales de su ingesta son la aparición de dolores de cabeza, de vómitos, insuficiencia renal, fiebre o naúseas, pudiendo confundirse en ocasiones con una gripe.
Amanita verna
La 'Amanita verna' es peligrosa, aunque no tanto como sus hermanas. Con todo, los efectos de su ingesta son fuertes a largo plazo, aunque tarden en aparecer los síntomas, llegando a producir un cuadro clínico realmente complicado. Se encuentran normalmente bajos los punos.
Boletus satanas
El 'Boletus satanas' es también engañoso, ya que de primeras parece una seta comestible, pero debe evitarse. Provoca vómitos y debilidad corporal y puede conducir a trastornos gastrointestinales de gravedad que pueden extenderse durante varias jornadas.
Psilocybe semilanceata
Este hongo produce consecuencias en el sistema nervioso ya que cuenta con psilocyna, una sustancia tóxica que actúa sobre el cerebro creando fuertes efectos alucinógenos. Una serie de setas que el aficionado al micoturismo debería evitar recoger cuando se adentre en los vastos bosques de Castilla y León.