Cientos de tractores participaron este viernes en la movilización convocada en la capital leonesa por los agricultores de la provincia, que reclaman más flexibilidad en la Política Agraria Común e igualdad de condiciones a la hora de poder competir con sus productos.
La marcha, con más de 500 tractores según un primer balance, se inició con una concentración de vehículos en el entorno del estadio de fútbol para continuar por el centro de la ciudad, acompañada del sonido de las bocinas, hasta llegar a la Subdelegación del Gobierno, donde tuvo lugar la entrega de un manifiesto en el apuntan que “debido a la pasividad de los sindicatos agrarios a la hora de trasladar sus problemas” los ganaderos y agricultores se ven obligados a agruparse “independientemente de cualquier organización, para luchar y ser escuchados ante la nueva PAC y las leyes aprobadas para el cumplimiento de la Agenda 2030”.
“Hasta que nos escuche el Ministerio de Agricultura, que es el que nos representa y traslade nuestro malestar a la Comisión Europea y ministerios pertinentes, para derogar o rebajar las leyes y reformas que están hundiendo al sector primario y despoblando nuestro mundo rural”, recoge el texto que recibió el subdelegado, Faustino Sánchez, con el anuncio de que el martes 6 de febrero se reanudan las protestas, aunque está previsto que las medidas de presión se mantengan todos los días anteriores con menor entidad.
Sánchez recibió en su despacho a dos representantes de los manifestantes y se comprometió a trasladar sus peticiones a instancias superiores y, tras ser reclamado para ello, salió al exterior de la Subdelegación.
La última parada de la protesta fue la delegación de la Junta, donde el delegado territorial, Eduardo Diego, también recibió a los agricultores y el manifiesto y se comprometió a hacerlo llegar a la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, además de mostrarse partidario de que se traslade a Europa la inquietud manifiesta de los profesionales del campo.
Entre las peticiones que plantean los agricultores y ganaderos está la derogación de la Ley de Bienestar Animal, claridad en el etiquetado con los países de procedencia de los productos y precio en origen y final, imposición de aranceles a la entrada de productos extracomunitarios, rebaja de la carga burocrática y derogación de la Agenda 2030.
El sonoro recorrido de los tractores, en todo momento alentados por las bocinas, estuvo secundado por numerosas personas a pie en una marcha completada con pancartas y carteles reivindicativos con mensajes como 'Nuestro fin será vuestra hambre', ‘El campo despierta. Precios justos ya’ o ‘El campo no se vende. Se defiende’.
El reproche a la ausencia de las organizaciones agrarias fue constante durante la jornada de protesta. Numerosas voces expresaron públicamente su decepción o enfado por no recibir un apoyo en mayor o menor medida de los sindicatos a los que muchos pertenecen y algunos invitaron a devolver esa falta de respaldo con bajas por parte de los asociados. “Parece que se la pela. No hay apoyo de ningún sindicato… si no nos movemos nosotros”, lamentó un manifestante.
“La gente está cansada. Te dicen lo que tienes que sembrar y hay veces que no se puede”, comentó uno de los presentes. Carmen, agricultora de Villlavante, reclamó “poder sembrar lo que se quiere y que lo que se produce tenga valor” y comentó que la bajada en el precio del maíz le va a suponer cuantiosas pérdidas este año.
También recalcaron que no consideran justo que se importen productos de otros países cuando se producen en España y que incluso cuenten con ventajas competitivas. “Todo sube y se gana nada. Hay que protestar”, recalcó Lorena, hija de un agricultor del Páramo leonés durante una manifestación que discurrió hasta primera hora de la tarde con una amplia presencia policial y sin incidentes, en la que no faltaron banderas de León y de España.
También tomaron la ciudad de Salamanca
Decenas de tractores ya se dejan ver este viernes por las calles de Salamanca para protestar contra los recortes de la nueva Política Agraria Común de la Unión Europa y el aumento de los costas de los insumos en los últimos meses. A media mañana, por la N-501, antigua carretera de Madrid, una columna de máquinas agrícolas arribó a la capital por Santa Marta de Tormes tras partir del próximo municipio de Encinas de Abajo.
Se trata de una protesta espontánea, que condiciona el tráfico de acceso por la urbanización de La Fontana, y que adelanta los acontecimientos previstos para la próxima semana en Salamanca, cuando hay una ‘tractorada’ convocada por las opas el jueves, día 8 de febrero, y otra manifestación divulgada en redes para el día 6, que en principio cuenta con amplio seguimiento, según pudo saber Ical.
Durante los últimos días se multiplican las protestas de agricultores de distintos países de la Unión Europa contra la nueva PAC y los elevados costes de producción, incluyendo Francia, Bélgica, Italia, Alemania, Polonia, Rumanía o Grecia. Este mismo jueves, agricultores portugueses cortaron la autovía A-62 junto a la frontera con España, en las inmediaciones del salmantino término municipal de Fuentes de Oñoro.
En Salamanca, varias organizaciones agrarias anunciaron el miércoles una movilización el próximo 8 de febrero desde varios puntos de la provincia para exigir cambios en las políticas de la Unión Europea, y un “plan de choque” en el campo.
La manifestación partirá de cinco puntos estratégicos de la provincia, incluyendo las autovías -A-66 en Topas y La Maya, la A-62 en Pedrosillo el Ralo y Aldehuela de la Bóveda y A-50 en Peñaranda de Bracamonte, y se dirigirá en diversas columnas hacia la capital del Tormes. Una vez congregados en Salamanca, los tractores circularán “de forma ininterrumpida” por la A-62 en el tramo que une el enlace de la N-630 en la rotonda del Helmántico con el enlace de la N-620 en la rotonda de Buenos Aires.