Las lluvias van a hacer acto de presencia este jueves en Castilla y León debido a la llegada de un frente a España. Sin embargo, estas precipitaciones serán un tanto inusuales, ya que se espera la presencia de polvo en suspensión, conocido como calima, según ha alertado la Agencia Estatal de Meteorología.

Este fenómeno podría desencadenar lo que se conoce como 'lluvia de sangre', caracterizada por su tonalidad rojiza. Se prevé que la calima se traslade de oeste a este en la región durante el día, afectando principalmente a áreas específicas de Castilla y León.

La Comunidad de Madrid se prepara para la posibilidad de precipitaciones de barro, aunque no se anticipa que alcancen la magnitud de eventos anteriores, como el ocurrido en marzo de 2022, cuando la región se vio envuelta en un manto rojizo, comparado con escenarios de películas como 'Dune' o 'Interestellar'.

Para este jueves 15 de febrero, se espera cielo nuboso en toda la Comunidad, con posibilidad de lluvia y chubascos, especialmente en la mitad este, acompañados de este peculiar barro. Además, se pronostican temperaturas mínimas con ligeros cambios y máximas en descenso en algunas zonas, con vientos del sureste girando a suroeste y oeste, con rachas fuertes o muy fuertes en la Cordillera Cantábrica.

Según Meteored, las lluvias más intensas se esperan durante la tarde, con periodos de lluvia débil entre las 14.00 y las 16.00 horas, seguidas de precipitaciones moderadas y más intensas desde las 20.00 hasta las 22.00 horas.

Así, durante la jornada de este jueves los termómetros oscilarán entre los 7 y los 14 grados en Ávila, entre los 8 y los 19 en Burgos, entre 5 y 16 en León, 8 y 19 en Palencia, entre los 7 y los 17 en Salamanca, de 9 a 16 grados en Segovia, de los 4 a los 18 en Soria, entre 8 y 19 en Valladolid y, finalmente, entre 8 y 18 en Zamora.

¿Qué son las 'lluvias de sangre'?

El fenómeno de las 'lluvias de sangre', aunque no es nuevo en España, vuelven a tener su foco de atención con la previsión de estos días. Las 'lluvias de sangre' son precipitaciones que van acompañadas de polvo en suspensión, creando un efecto visual de tonalidad rojiza en el agua. Este polvo, originado por la calima, ha comenzado en la zona de Canarias y se prevé que alcance la vertiente atlántica peninsular en las próximas horas.

El proceso de formación de las 'lluvias de sangre' implica varios pasos. En primer lugar, se genera una borrasca que favorece la formación de una situación de calima, donde las partículas de óxido se adhieren a las gotas de agua de las precipitaciones. Con el tiempo, estas gotas cargadas de polvo adquieren un tono rojizo a medida que aumenta su peso y finalmente caen al suelo, dando lugar a las 'lluvias de sangre'.

Aunque este fenómeno es más común en primavera u otoño, este invierno también está siendo protagonista. Se espera que estas 'lluvias de sangre' persistan hasta el viernes, cuando se prevé que desaparezca la vaguada de polvo sahariano procedente del Atlántico, desplazándose hacia el suroeste peninsular a través del Mediterráneo.