Vox ha logrado sacar adelante en el pleno de este miércoles una moción instando a la Junta a presentar "con la mayor premura" el censo actualizado de la población del lobo en Castilla y León y al Gobierno a establecer "una protección racional" del lobo, compatible con "los intereses de los ganaderos".

Una iniciativa, que también aboga por llevar a cabo una campaña informativa entre los ganaderos de las zonas afectadas y por revisar el trámite administrativo previsto para las reclamaciones de quienes han sufrido ataques, que ha salido adelante con 46 votos a favor de Vox, PP, Por Ávila y Francisco Igea. 

El PSOE ha optado por la abstención, responsabilizando a la Junta de la situación generada para los ganaderos, y también se ha abstenido el Grupo UPL-Soria Ya en las Cortes autonómicas.

La iniciativa pide que se adopten las "medidas reglamentarias oportunas" para autorizar a los ganaderos a la conservación de las reses muertas por ataques del lobo hasta la llegada del agente medioambiental encargado de documentar los ataques y que se incluyan en los daños y perjuicios los gastos veterinarios de largo tratamiento.

También, que se incluya en esos daños y perjuicios el importe de reses que mueren con posterioridad a ataques del lobo, el lucro cesante consecuencia del estrés latente en los rebaños, los abortos y la falta de producción y que la Junta inste al Gobierno a establecer una protección "racional" del lobo compatible con los "intereses de los ganaderos".

Por último, la moción aprobada este miércoles en las Cortes, e impulsada por Vox, exige al Ejecutivo nacional que proceda a eliminar al lobo de la lista de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial (Lespre).