El alcalde de León y candidato a la Presidencia del PP de Castilla y León, Antonio Silván, ha pedido a todos sus colaboradores reducir el clima de euforia que se respira entre ellos y les pide a todos que se centren en los afiliados y no se dejen llevar por el apoyo púbico de los dirigentes del partido.

Así y todo, Silván se mostraba satisfecho esta mañana en la capital leonesa por el apoyo recibido la noche anterior por la cúpula del PP de Valladolid. Dirigentes y afiliados abarrotaron la sede provincial vallisoletana ante un Silván que reiteró su mensaje ya conocido de que, si gana, prevalecerá la política de calle, de cercanía a los ciudadanos, frente a la gestión de los despachos.

Esta tarde Silván repetirá este mensaje en dos de sus visitas más complicadas a la Comunidad: Segovia y Soria, provincias en las que, según parece, tiene más apoyos, al menos de los líderes, su rival Fernández Mañueco. A pesar de ello, Silván no pierde la sonrisa y el optimismo: "Vamos a dejar que hablen, que se expresen y voten los afiliados".

Por otra parte, Silván no quiso entrar en polémica  con Mañueco sobre los pretendidos pactos entre ambos antes de la campaña electoral, por el que Mañueco le habría ofrecido la Secretaría General,  o si el aparato nacional de Génova ve con más posibilidades a Mañueco que a él. "Insisto, es hora de que se expresen los afiliados", insiste sin desdibujar la sonrisa de su rostro.