La estación se constituiría como una unidad de excelencia de las producciones de la dehesa, gestionada por técnicos especialistas en investigación y extensión agraria, que supieran recoger las mejores iniciativas del campo charro para aplicarlas en Castro-Enríquez y a su vez experimentaran nuevas mejoras, para trasladarlas nuevamente a los agricultores y ganaderos de la provincia.

La Dehesa de Castro-Enríquez se encuentra en un punto de inflexión, tras muchos años de bloqueo por la incapacidad política para erradicar la tuberculosis bovina en la explotación. No obstante, las medidas puestas en marcha parece que han empezado a dar sus frutos; además, la entrada del nuevo diputado, acompañado de los grupos políticos de la oposición, puede suponer un revulsivo en la gestión de la finca, poniéndola al servicio de las personas de nuestro medio rural, con atención especial a los profesionales del campo, que tan huérfanos están en cuanto a la investigación adaptada a las difíciles condiciones de nuestra provincia.

Es por ello, que desde Ganemos Salamanca consideramos imprescindible transformar la actual gestión, orientándola realmente a la experimentación y la extensión agroecológica, dentro del modelo multifuncional de dehesa fría, imperante al oeste de nuestra provincia. Un nuevo modelo de gestión que debe pasar, indefectiblemente, por la contratación de técnicos especialistas en estas materias: investigación, extensión y gestión de explotaciones agroforestales de zonas semiáridas, con el fin de convertir a Castro-Enríquez en una auténtica estación experimental de la dehesa salmantina, como hace más de treinta años se propuso, sin que nunca se llegara a buen término por la mala gestión política de los sucesivos gobiernos provinciales.

La realidad actual es bien diferente, siendo inconcebible que actualmente no se puedan disponer de índices técnico-económicos de las distintas producciones (vacuno, ovino, etc.), y que ni siquiera exista un sistema de control estándar informatizado, siendo ésta una de las primeras prioridades; además de la contratación de los técnicos necesarios para coordinar, dirigir y ejecutar el nuevo plan que deberá redactarse. En este nuevo plan creemos que la producción ecológica y la incorporación de las nuevas tecnologías deben jugar un papel fundamental, así como manejo de las distintas especies ganaderas, la implantación y desarrollo de especies pratenses o una mejor conservación del monte, debiendo ser coordinadas estas acciones desde la dirección del centro con las agencias de investigación que pudieran estar interesadas, en el marco del proyecto propio del centro experimental, orientado a la mejora y desarrollo del modelo multifuncional y agroecológico de la peculiar dehesa salmantina, basada en unas condiciones que la diferencian del resto de zonas adehesadas.