Cruz Roja forma a una treintena de personas para un oficio
Cruz Roja de Salamanca ha reconocido este viernes la adquisición de una cualificación profesional por parte de 29 personas que ha respondido a las necesidades de aprendizaje de un oficio por no disponer de ninguno, o a las necesidades de reciclaje de un oficio del que se dispone, pero que ha quedado obsoleto. Así, se ha formado en operaciones auxiliares en el punto de venta y ayudante de cocina. Conocimientos que además han incorporado módulos transversales de igualdad de oportunidades, nuevas tecnologías y desarrollo sostenible.
Desde su puesta en marcha en el año 2000, el Plan de Empleo de Cruz Roja ha cambiado las vidas de más de 600.000 personas, teniendo como horizonte que las personas en mayor dificultad social o que se encuentran más alejadas del mercado laboral, puedan acceder y mantener un empleo en igualdad de condiciones, como instrumento fundamental para la inclusión social.
Para llevar a cabo este compromiso, Cruz Roja cuenta con el apoyo de la sociedad, las empresas y las administraciones públicas territoriales, así como con el apoyo del Gobierno de España, a través del Ministerio de Empleo y Seguridad Social, y de la Unión Europea, en este caso, a través de financiación procedente de los fondos de cohesión de la Unión Europea, como es el Fondo Social Europeo (FSE), mediante la participación de la organización en el Programa Operativo de Inclusión Social y de la Economía Social (POISES).
Desde el Plan de Empleo de Cruz Roja se trabaja para mejorar las posibilidades de empleo de las personas en dificultad social y que sufren discriminación en el mercado laboral, principalmente personas inmigrantes, solicitantes de asilo, refugiados y las personas más alejadas del mercado de trabajo: mujeres en dificultad social, jóvenes sin cualificación, personas sin techo, mayores de 45 años, entre otras.
Para alcanzar este objetivo se proponen itinerarios integrados y personalizados de inserción sociolaboral con una perspectiva de género, competencial y de diversidad, que combinan medidas de activación, motivación, información, orientación, formación en competencias transversales, capacitación profesional, acceso a las tecnologías, prácticas no laborales en entornos reales, ayudas, acompañamiento e intermediación laboral así como la tutorización y seguimiento permanente.