El PSOE plantea el desarrollo de un programa municipal de educación sexual en la ciudad de Salamanca

El Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de Salamanca propone la elaboración y puesta en marcha de un programa de educación sexual en la ciudad con el fin de promover relaciones afectivo-sexuales saludables, inclusivas, libres y seguras, una iniciativa que defenderá como moción en el Pleno de este viernes, 4 de junio, y que han presentado en rueda de prensa el portavoz José Luis Mateos y el concejal Juan José García Meilán.

Entre las acciones propuestas por los socialistas se incluye el desarrollo de una campaña específica con material adaptado a diferentes edades en función de los destinatarios, la creación de un servicio municipal de asesoría, orientación e información sobre sexualidad dirigido a adolescentes y jóvenes en los Centros de Participación, así como el diseño y ejecución de un programa municipal de talleres de educación sexual. Todo ello, a través de protocolos de colaboración con el Grupo de Investigación sobre Sexualidad y Relaciones Interpersonales de la Universidad de Salamanca, con expertos destacados en este ámbito de actuación que, además, son pioneros e impulsores del estudio de la sexualidad a nivel nacional.

“Este tema debe abordarse de manera clara. Hace meses planteamos la necesidad de establecer un Plan Municipal de Salud Mental, en este Pleno pedimos la actualización del Plan Municipal de Salud y también esta iniciativa para fomentar la educación sexual, un asunto que ha sido tabú en la sociedad y que debe tratarse de forma integral, seria, rigurosa y sin una visión distorsionada, más allá de los talleres que ya pueda tener la Escuela Municipal de Salud, que son insuficientes”, ha afirmado el portavoz socialista.

Como ha recordado García Meilán, “en todos los currículos educativos de la democracia española ha figurado siempre el epígrafe de la educación afectivo-sexual, pero desde una perspectiva biologicista y se olvida la importancia que tiene en los adolescentes y jóvenes a la hora de favorecer una aceptación positiva de su identidad sexual, libre de elementos discriminatorios, y generar vínculos sanos entre ellos”.

Entre los principales riesgos que debe abordar la educación sexual, se encuentra el no uso del preservativo, con un 25 % de jóvenes que afirma no haberlo utilizado en su última relación, según datos del Instituto de la Juventud, y el alarmante aumento de las enfermedades de transmisión sexual, como la sífilis un 54 %, el gonococo un 160 % y también un repunte en el VIH-SIDA.

Del mismo modo, han puesto de manifiesto que el aumento del consumo de pornografía en la población joven está normalizando ciertas conductas que aparecen en este tipo de filmografía y que pueden derivar en violencia y predominancia del hombre sobre la mujer. Según la Fundación ANAR, los abusos sexuales han aumentado un 300 % en diez años, a lo que hay que añadir nuevos riesgos como el ‘sexting’, el envío de fotos o vídeos de contenido sexual, o el ‘chemsex’, fiestas en las que se toman drogas para mantener relaciones sexuales.

“Evidentemente, la educación sexual debe prevenir este tipo de riesgos pero, al mismo tiempo, debe ser capaz de promover hábitos saludables que mejoren la calidad de vida, como el automanejo emocional de las relaciones y la sexualidad como una forma de obtener placer, comunicación y deseo”, ha indicado el concejal socialista.

En esta línea, “es fundamental contrarrestar los agentes socializadores de riesgo y ofrecer herramientas a los adolescentes y jóvenes para obtener información verídica y saludable, frente al contenido no contrastado que puedan conseguir en Internet y la carencia de fuentes de información sexual fiables, ya que las principales en estos grupos de edad son los amigos, a través de comentarios, silencios o chistes, y es importante que puedan acudir a la propia familia para obtener conocimientos”, ha afirmado. Por otro lado, es fundamental visibilizar la sexualidad en las personas mayores, evitar actitudes edadistas y promover actitudes positivas hacia la misma.

“Tenemos las herramientas necesarias y lo que debe hacer el Ayuntamiento de Salamanca es impulsar un programa municipal y arbitrar buenas fórmulas de la mano de expertos en sexualidad de la Universidad para llegar a diferentes públicos a través de campañas, de un servicio de asesoramiento como el que ya hay en otras ciudades y de talleres de educación sexual dirigidos tanto a alumnos, como a madres, padres y profesores para abordar este tema”, han concluido.