El Ayuntamiento de Salamanca renueva casi dos kilómetros de tuberías para mejorar el abastecimiento en La Fuente y Peña Alta

El Ayuntamiento de Salamanca está renovando 1.945 metros de tubería para mejorar el abastecimiento de agua de los vecinos de la urbanización La Fuente y las empresas en la nueva zona industrial de Peña Alta con una inversión de 673.584,42 euros.

Las obras conectarán los depósitos de agua potable de Cañones y El Polvorín, y así se mejorará el caudal y la presión del agua tanto de los vecinos de la urbanización y los negocios que se establezcan en la nueva zona industrial de Peña Alta.

La concejala de Medioambiente, Miryam Rodríguez, destaca el "fuerte impulso" que el Ayuntamiento está realizando durante este mandato para mejorar la red de agua de Salamanca. Hasta ahora, las acciones que se han venido acometiendo han permitido la renovación de casi 18 kilómetros de tuberías, en 96 calles con una inversión superior a los 14 millones de euros.

Una cantidad que, anuncia, se incrementará con la renovación de la red de distribución de agua en 665 metros de cinco calles del barrio Labradores (Primero de Mayo, Padre Astete, Juan del Encina, Santander y Don Bosco) y en 325 metros en el paseo de la Estación.

Miryam Rodríguez también ha destacado la renovación de la red desde la puesta en marcha del sistema de Gestión Activa de Presiones, en 2017. La concejal recuerda que esto ha propiciado un ahorro neto de 7.558.376 metros cúbicos de agua durante los cuatro años de funcionamiento, lo que equivale al suministro de una población de unos 20.000 habitantes durante cinco años.

Además, ha señalado que estas mejoras "no sólo han permitido sustituir las tuberías actuales y ahorrar agua, mejorando el servicio para los vecinos, sino que también evitan las molestias como consecuencia de las roturas en la red". Todo gracias al sistema inteligente que regula la presión en la red cuando hay menor demanda de agua y optimiza esta presión según se va necesitando. Algo que aumenta en 16 años la vida útil de las tuberías.

El GAP se controla desde la potabilizadora, desde centro de mando y visualización, donde trabajadores de Aqualia coordinan el sistema al que llegan a diario más de 10.000 datos, que permiten tener monitorizada la red permanentemente para mejorar la calidad del servicio "evitando averías, minimizar las perdidas y los sectores afectados".