El Indiana Jones de Segovia que reclama a Europa recuperar las joyas visigodas expoliadas por los nazis
Con solo 18 años, Arturo Francisco Barbero ha logrado que la Comisión Europea admita su petición para la recuperación del patrimonio Castiltierra que hoy sigue en museos alemanes y austriacos
19 noviembre, 2023 08:30Noticias relacionadas
No es manchego, pero podría ser todo un Quijote o un Indiana Jones en su lucha contra los nazis. Arturo Francisco Barbero tiene 18 años y es segoviano (de Trescasas), pero ante todo, un luchador al que le gusta “quejarse”. Pero no lo hace desde su sillón o desde las redes sociales, él lo hace desde donde hay que hacerlo. Ante el poderoso, ante las administraciones. Un Quijote que luchó hace un año porque desapareciera de la Wikipedia el término de Sierra de Madrid para referirse a la Sierra segoviana de Guadarrama. Y lo consiguió.
Su segunda misión reivindicativa ya tiene nombre y ha llegado hasta la mismísima Unión Europea. Operación ‘Restitución de bienes culturales procedentes de la necrópolis visigoda de Castiltierra que salieron de España de forma ilegal’, o lo que es lo mismo, que unas piezas y joyas que fueron expoliadas en 1940 por la Alemania Nazi, y que hoy siguen en museos alemanes y austriacos, sean devueltas a Castiltierra, una pedanía perteneciente a Fresno de Cantespino, municipio de poco más de 200 habitantes y donde se encontraron numerosas piezas visigodas que datan de los siglos V al VIII después de Cristo.
“Estas joyas no tiene un valor económico, pero sí tienen un valor incalculable para nuestra provincia, no solo desde un punto de vista económico, sino también cultural e histórico. Es inaceptable que estas joyas se encuentren en manos de particulares o museos extranjeros cuando su legítimo propietario es nuestra comunidad”, comenta Arturo.
Así, este segoviano comenzó su lucha con cartas a Ayuntamiento, (le entendieron, pero no tienen medios para reclamarlo), Diputación de Segovia y Junta de Castilla y León, ninguna de las dos administraciones ha contestado. Y curiosamente, la que parece menos accesible, al ser la más distante en kilómetros y en recepción, es la que ha contestado. Y es que la Comisión Europea le ha respondido. Solo tuvo que abrir una cuenta en la página web y realizar la petición. “Me quedé muy sorprendido, porque además de responder lo hicieron en cuatro meses, algo que no es habitual”, afirma.
En la carta, firmada por Dolors Montserrat, se acepta su petición y se declara admisible, “ya que el asunto que usted plantea entra dentro de los ámbitos de actuación de la Unión Europea”. Por ello, ya se ha solicitado a la Comisión Europea que lleve a cabo una investigación preliminar sobre este asunto, todo ello argumentado por una resolución sobre solicitudes transfronterizas de restitución de obras de arte y bienes culturales saqueados en conflictos armados y guerras. Arturo tiene la esperanza de que su cruzada llegue a buen puerto. Para ello hace una requerimiento al Gobierno, “ahora que ya no está en funciones” y a la Junta de Castilla y León “con competencia en Patrimonio” para que también puedan mediar. Además que mejor forma de celebrar la presidencia de la Unión Europea que con este regreso.
En Austria y en Alemania
Este botín que fue usurpado por los nazis contenía diferente ornamentación funeraria. Por ejemplo, fíbulas trilaminares, grandes placas de cinturón con incrustaciones vítreas, broches de cinturón de bronce con decoración bizantina, pendientes de bronce y plata, brazaletes de bronce, collares de cuentas de ámbar y pasta vítrea y algunas vasijas cerámicas. Con todo este material devuelto, el joven no duda que se podría dinamizar la zona para atraer turistas con la apertura de un centro de interpretación de arte visigodo. “Estamos ante una de las necrópolis más importantes de esta época”, apunta. Parte del tesoro se encuentra en el Germanisches Nationalmuseum de Núremberg (Alemania) y otras piezas se encuentran en el Kunsthistorisches Museum de Viena (Austria).
En 2023, se destacó el compromiso español con la devolución de obras de arte expoliadas durante la Segunda Guerra Mundial. Un ejemplo de esto fue la devolución de dos pinturas por parte del Museo de Pontevedra a Polonia. Estas obras habían sido robadas por los nazis y su regreso a su lugar de origen fue un importante gesto de restitución histórica.
Con solo 18 años, Arturo Francisco Barbero no se considera ni un cabezón ni un Quijote, simplemente piensa que “no hay tantas diferencias entre escribir una frase en las redes sociales, como X, o entrar en la pagina web de la UE y mandar una reclamación”. Él lo ha demostrado. Y la cruzada visigoda no es la última del segoviano, ya advierte que hay otras tres cosas que serían “interesantes” de comenzar su recuperación. El Pinar de Balsaín que se apropió “indebidamente” Carlos III y pasó a Patrimonio Nacional, el peaje de la autopista Ap-6 y el antiguo monasterio de Sacramenia del siglo XII que fue trasladado piedra a piedra hasta las afueras de la ciudad de Miami. Arturo comienza su reconquista.