El restaurante de carretera en el que tienes que parar si pasas por Segovia: es famoso por su lechazo y torrijas
- Cuenta con una amplia carta repleta de productos de la zona y también tiene un hotel con calles privadas para pasear.
- Otros restaurantes de carretera: El restaurante de carretera en el que tienes que parar si pasas por León: se come un delicioso cocido maragato
Noticias relacionadas
Hacer un alto en el camino es una de las cosas más importantes cuando se realiza un viaje por carretera. Poder descansar, tomar el aire, estirar las piernas y llenar el estómago es fundamental, sobre todo, cuando llevas muchas horas subido a un coche.
Lo cierto es que, en numerosas ocasiones, por desconocimiento no sabes dónde puedes parar. Muchos apuestan por un menú para comer, otros prefieren una comida poco copiosa y también los hay que buscan exclusividad en cada plato.
Sin duda, hay cientos de restaurantes de carretera, pero cuando viajas por la provincia de Segovia, o la tienes que cruzar, hay uno que destaca especialmente por encima del resto.
Se trata del Área de Boceguillas. Un delicioso restaurante, con Solete Repsol, que abre desde las 07:30 hasta las 22:30 horas ininterrumpidamente. Cuenta con una carta elaborada y variada y con unos manjares que a todo el mundo le encantan.
Desde el famoso cordero asado en horno de leña, hasta platos de huevo de corral, verduras frescas, postres caseros, bocadillos en pan de torta, bizcochos o galletas caseras. Un sitio ideal para parar a saborear los mejores productos de la tierra.
El restaurante destaca porque en el salón circular que tiene, hay una impresionante cúpula y la carta está repleta de productos de la zona. Algunos de los platos que ellos mismos recomiendan son:
Cordero lechal asado en horno de leña, ensalada de bacalao con habitas y emulsión de pilpil; gallo de corral confitado en salsa de naranja y miel; ciervo estofado; sopa castellana con chorizo o potaje de garbanzos con setas de la zona. Y para culminar esta sabrosa comida, unas torrijas, su especialidad.
Este lugar no solo tiene un buen restaurante para disfrutar sino que también es posible quedarse a dormir en su hotel Las Casitas.
Amplias casitas con garaje privado y una gran habitación equipada con cama de matrimonio o dos camas individuales. El baño incluye bañera, espejo, secador de pelo y bidé.
También hay cuatro terracitas y calles privadas para pasear y disfrutar al aire libre y de este espacio de relax.
Las sorpresas no acaban ahí porque también poseen una bodega excavada en roca con temperatura natural y donde se encuentra una selecta elección de vinos.
En el interior, hay un horno de leña independiente, cuevas y arcos que albergan salones para celebrar eventos o tomar un aperitivo.
Ubicación
A este especial restaurante y hotel se puede acceder por muchos lugares. Bien sea por las salidas 115 y 118 de la A-1. Está en una ubicación perfecta, a una hora del centro de Madrid, Burgos, Segovia, Soria y Valladolid.
También cuenta con mucha proximidad a pueblos que son especiales y dignos de realizar una visita como es el caso de Sepúlveda, Pedraza, Ayllón, Turégano, La Granja de San Ildefonso o Maderuelo.
A un paso también se encuentran parajes naturales como Las Hoces del río Duratón, el embalse de Linares, Somosierra, el nacimiento del Duratón o las hoces del río Riaza. Para los amantes de la nieve, la estación de esquí de La Pinilla está a tan solo 20 minutos.