Hallazgo de las fosas comunes en la provincia de Soria

Hallazgo de las fosas comunes en la provincia de Soria Asociación Recuerdo y Dignidad

Soria

Encuentran dos fosas comunes del 1936 en la provincia de Soria

El hallazgo ha permitido localizar tres cadáveres

14 septiembre, 2023 13:24

Dos fosas comunes han sido encontradas en el paraje de 'El Cargado', cerca del municipio soriano de Villasayas. Tras una infructuosa búsqueda en marzo de 2022, la Asociación de Recuerdo y Dignidad ha logrado encontrar estas fosas en sus trabajos para encontrar personas asesinadas, secuestradas y enterradas clandestinamente.

La Policía Judicial ha recogido parte de los restos mortales que han aparecido y serán entregados en el juzgado de Almazán por la judicialización del asesinato. Estas dos fosas comunes fueron halladas tras una semana de trabajo y más de tres años de indagación e investigación de los vecinos. 

Sendas fosas, muy cercanas una de la otra, tenían dos cadáveres una y uno la otra. Con todas las evidencias encontradas, pero a la espera de que las pruebas de ADN lo confirmen, todo hace indicar que serán la de las tres personas que Recuerdo y Dignidad estaba buscando por petición de sus familiares.

Encuentran dos fosas comunes en la provincia de Soria

Encuentran dos fosas comunes en la provincia de Soria Asociación Recuerdo y Dignidad

La primera víctima sería Esteban Ciria Ballesteros, un picapedrero de Almazán. Su hermano le vio la última vez cuando subía a la fuerza a un coche en la Puerta de Herreros de la villa. Fue el 19 de septiembre de 1936. En este caso, esta víctima habría sido asesinada "sola", según explica la asociación, mientras que las otras dos fueron "fusiladas juntas".

Eran Rufino Gómez Escribano, un maestro de Barahona "asesinado" el 22 de agosto de 1936 y Félix Iglesia Casado, un agricultor también del mismo municipio y de gran estatura, que fue sacado de la cama con una neumonía para ser "fusilado". También habría sido "asesinado" junto a ellos Gregorio Sanz Iglesia, pero en este caso fue desenterrado por su familia la misma noche del suceso e "inhumado de nuevo en el cementerio civil de Barahona".

En los trabajos han participado más de 20 voluntarios, siendo vecinos de Villasayas, Barahona, Almazán y Fuentegelmes. Al paraje se ha llegado hasta él gracias a los testimonios orales, apoyos y colaboración en las tareas.

La intervención no ha sido solo con carácter "científico", sino que también comprende una labor "humana", teniendo por objeto que se "respeten los Derechos Humanos, no se pierda la memoria de las víctimas y se garanticen los valores de no repetición".