Va a cumplirse casi medio año desde que Esther López desapareciera aquel fatídico ya 13 de enero de 2022. Días más tarde, concretamente el 5 de febrero, el cuerpo sin vida de la mujer de 35 años era descubierto en una cuneta de la N-122 que desemboca en la localidad vallisoletana de Traspinedo, pueblo de la tristemente fallecida.
Hace apenas una semana, el caso por la desaparición y muerte de Esther experimentó novedades. Fin al “pinchazo” telefónico a Óscar, también al secreto de sumario, y la jueza titular del Juzgado de Instrucción Número 5 de Valladolid que lleva el caso, Soledad Ortega, recibía un informe que rechazaba que los restos de pintura hallados en la ropa de Esther correspondieran al coche de Óscar, que continúa en el centro de todas las miradas.
Charlamos con Guillermo Ruiz Blay, abogado de la familia de la mujer fallecida tras conocer estas novedades. “Lo que supone una carga y una ansiedad es que el autor no confiese los hechos”, asegura el letrado, que añade para EL ESPAÑOL de Castilla y León que
P.- ¿Cómo está la familia de Esther tras el informe que apunta a que los restos de pintura que presentaba el pantalón de la fallecida no son del coche de Óscar?
R.- No hay cambios porque ya hay un informe anterior que desvinculaba restos de pintura, que se habían encontrado en la ropa de Esther, con el coche.
P.- ¿Han sido un mazazo para la familia las últimas noticias que se han conocido?
R.- No. Lo que supone una carga y una ansiedad es que el autor no confiese los hechos. Eso daría mucha tranquilidad, incluso sabiendo que él podría justificar esto de algún modo para explicar que fue accidental. Su actitud, ahora mismo, es tremendamente demoledora. Sobre todo, desde el punto de vista moral. Y, el resto, a la espera de la finalización de la investigación.
P.- Hablando de la investigación, ¿Hacia dónde puede apuntar ahora?
R.- La investigación continúa. El siguiente hito importante va a ser el contenido de la centralita del vehículo, por supuesto. Y que se terminen de concluir algunos informes más pendientes. El más relevante es el que está pendiente sobre la centralita del vehículo.
P.- La jueza acabó también con el pinchazo telefónico que se mantenía sobre Óscar. ¿Considera que es una decisión acertada? La Guardia Civil pedía que se mantuviera.
R.- La Guardia Civil se debatía entre mantener o no el pinchazo. Realmente, la persona que estaba siendo escuchada ya tenía el conocimiento de que lo estaba siendo. Había dado instrucciones a su núcleo familiar para que no hablaran de nada relacionado con el tema por teléfono. No era una fuente de información fiable. Ese pinchazo telefónico se llevó a cabo de forma tardía y no parece una decisión desacertada. Pienso que es correcto porque no iba a aportar grandes cosas.
P.- Se levanta el secreto de sumario.
R.- Lo veo bien. Nos permite ya conocer los autos completos. También, aportar desde la representación de la familia, aquellas cosas que se nos ocurran.
P.- ¿La familia continúa con una investigación paralela?
R.- Continuamos con todos los medios de investigación desde el punto de vista tecnológico que habíamos iniciado. También de incremento de los indicios que se puedan acumular en relación con la posible autoría de una de las personas investigadas con los hechos, pero quiero decir que, durante todo este tiempo, el trabajo de la Guardia Civil ha sido detallado, y tal vez haga innecesaria nuestra labor paralela.
P.- ¿Qué pruebas pueden ser determinantes en este punto de la investigación?
R.- Desde nuestro punto de vista ya hay muchas. Existen indicios que, entendidos en el conjunto de la investigación, permiten perfectamente celebrar un juicio y, por tanto, ya no hay pruebas determinantes, sino pruebas que vienen a afianzar lo que ya existe. Hay un tema importante que son las ausencias. Las ausencias de explicación de muchas cosas que son también valorables desde el punto de vista judicial.
P.- ¿Está más lejos de resolverse el caso de la muerte de Esther?
R.- No está lejos de resolverse y entiendo que, en breve, lo conseguiremos.
P.- ¿La familia cómo está?
R.- La familia se encuentra a la expectativa de concluir la investigación.