De la pintura a la docencia: el artista que pone la uva en Cigales
Juan Hernández colecciona trabajos en la localidad vallisoletana. El último, una vendimiadora que pone el color a la entrada de un pueblo con encanto gracias a los mejores vinos
12 julio, 2022 07:00Natural de Zamora y nacido en el año 1963, Juan Hernández pasó 15 años de su vida en Madrid. Desde hace 30 da clases y se asentó en Valladolid. Compró una casa en Cigales, en el año 2001, un municipio vallisoletano en el que se siente “bien acogido”. Por ello, ha realizado varios murales, de forma altruista, en el conocido pueblo pucelano.
“Mi último trabajo está en el muro a la entrada de la localidad. Lo he titulado “La vendimiadora”. Creo que puede ser un buen emblema para un lugar que tiene una denominación de origen en vino clarete. Me gustaría desarrollarlo en una pared grande, bien aquí, en otro pueblo de la DO o en varios”, afirma el artista en declaraciones a EL ESPAÑOL de Castilla y León.
Pintura y docencia, íntimamente relacionadas
“Como pintor he realizado exposiciones en diferentes lugares de la geografía española y fuera de nuestro país. Destacaría varias muestras individuales en Lituania. He sido seleccionado, además, para exponer en dos de las salas más importantes de Valladolid, la del Teatro Calderón, en el 2010 y la del Teatro Zorrilla, en 2017. Gané un premio de fotografía Lexmark dotado con 6.000 euros en 2004”, nos cuenta nuestro entrevistado, con mucho orgullo y no podía ser de otra forma.
Su pasión por la pintura la combina, a la perfección, con su profesión. Es profesor de Dibujo de enseñanza secundaria. Lleva 34 impartiendo clase. Los tres últimos dentro del Bachillerato Artístico en el IES Delicias.
“Pienso que mis dos actividades se enriquecen una a la otra. Si sigo pintando, haciendo fotos y exposiciones es más fácil que consiga transmitir el gusto por lo que enseño que es mi máxima como profesor”, explica.
Trabajos en Cigales
Además de “La vendimiadora”, Juan Hernández realizó un mural en septiembre de 2018, que también está a la entrada del pueblo. “Representa una de mis pinturas dentro del catálogo de la exposición en la sala del Teatro Zorrilla de Valladolid. La chica de espaldas es un dibujo de Salvador Dalí. El Ayuntamiento me pagó las pinturas”, añade.
Otro, que adjuntamos a continuación, y que fue realizado en el año 2021 que es “un regalo para el pueblo”. Continuación del anterior y que “representa el momento de la vendimia con diferentes personas recogiendo la uva, en el paisaje cigaleño”, confiesa.
Entre estos dos trabajos elaboró un mural que se centraba en la violencia de género. Una obra que se encuentra ahora en el Centro Cívico ‘Las Pañuelas’ con unas medidas de 2,40 x 2,40 metros utilizando la técnica: acrílico sobre madera.
“La mujer muestra el sufrimiento que genera la violencia de género. La mano, el empoderamiento de la mujer y el slogan: “Ni una menos”, que es mi propósito. Los pájaros y la mariposa, la libertad, tan necesaria para el ser humano. Las flores, la naturaleza”, asegura explicando su trabajo.
Cuenta con otros dos. Uno en la biblioteca del pueblo, del año 2015 y otro, el primero, que está en la fachada de su casa y en el que se puede ver a tres ancianos que se sientan a charlar y a ver cómo el tiempo pasa.
La noción de “querencia”
“La noción de querencia se vincula al hecho de querer bien a algo o a alguien. Yo la tengo por mi trabajo. Pienso que eso es una virtud. La búsqueda de la belleza en la estética de mis cuadros, la técnica utilizada (acrílico y lápices de colores sobre madera) me sirven para crear una obra de la que me gusta que disfruten los demás”, añade nuestro protagonista.
Juan añade que su trabajo como artista “busca una identidad y un estilo propio dentro de este mundo” con un “uso de un dibujo preciso” y de “colores vivos” con la “belleza formal en los personajes elegidos” que hace “fácil” que los que las ven “puedan reconocer su obra” consiguiendo así “un estilo personal"
“Esta es una parte de mi trabajo y la otra, la que me da sustento, es mi tarea como profesor. Ambas se complementan. Mi faceta como artista hace posible que transmita con más facilidad el gusto por lo que enseño a mis alumnos, creando, de nuevo, querencia por mi trabajo”, finaliza.
Un artista que hace sonreír a Cigales con sus trabajos de quilates.