Un edificio con mucha historia, a la venta por casi 200.000 euros: “Es la torre que vigila al pueblo”
El silo ubicado cerca de la antigua vía férrea de Villalón tiene más de 70 años de vida
29 septiembre, 2022 07:00Noticias relacionadas
El Fondo Español de Garantía Agraria (FEGA), dependiente del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA), ha puesto a la venta un total de 22 silos mediante el procedimiento de subasta al alza con presentación de ofertas sobre cerrado, que están repartidos por cinco comunidades. Hay nueve edificios ubicados en Castilla y León y uno de ellos está en la localidad vallisoletana de Villalón de Campos.
El BOE de ese lunes, 12 de septiembre, detalla el precio de salida del inmueble: 193.665,84 euros, ubicado en la carretera Palencia, 20. El municipio vallisoletano cuenta con una población, en la actualidad de 1.526 habitantes y con edificios emblemáticos como el Rollo Jurisdiccional, ubicado en la Plaza Mayor o las iglesias de San Juan y San Pedro.
“El significado que damos, en Villalón, al silo es que lo puedes ver a lo lejos y muestra un poco de nuestra historia. Es la torre vigía del pueblo. Da nostalgia verlo porque hace años había muchos obreros allí trabajando y era un centro industrial”, nos explica en declaraciones a EL ESPAÑOL de Castilla y León, Rufino García Marcos, concejal hace años y experto en la historia de su pueblo.
“Subí a lo alto del silo con mi padre”
Desde que el ser humano conoció la agricultura, la necesidad de guardar los productos recogidos en las mejores condiciones posibles cobró una relevancia especial. Tanto los griegos, como los egipcios, como los romanos y todas esas grandes civilizaciones empleaban grandes superficies destinadas al almacenamiento y acopio de diferentes productos agrarios (sobre todo en el caso del grano y los cereales). Por lo tanto, ellos ya sabían lo que era un silo de almacenamiento.
La RAE (Real Academia Española) define esta palabra como un lugar seco que sirve para almacenar ese trigo, semillas y otros granos de forraje, pero podríamos asegurar que la realidad va mucho más allá: sirve para el acopio de muchos materiales o productos como el cemento o minerales, por poner otros usos característicos y alguno de ellos puede estar dotado ahora de elementos tecnológicos capaces de realizar dosificaciones muy precisas de los productos.
“Se acabó de construir allá por el año 1956. Lo conocí porque recuerdo que un domingo subí a lo alto del edificio con mi padre que tenía amistad con el encargado. Subí por las escaleras y tengo un recuerdo de mirar al campo desde lo alto del edificio”, nos cuenta Rufino García Marcos, hablando del emblemático edificio.
Asegura que, por esos años, y cuando estaba en construcción, despertó “una gran expectación” porque se trataba de un edificio que estaba hecho “con hormigón armado”, algo que era novedoso hasta ese momento porque “se construía con adobe”. Un silo que, como nos confirma este experto en la historia de la localidad vallisoletana “en 1958 estaba funcionando”.
“Lo construyeron, con acierto, cerca de estación de tren”
“Por aquellos años el cereal lo compraba el Estado. En concreto el Servicio Nacional del Trigo. Daban a los labradores un anticipo y, en septiembre, se vendía al precio que marcaban. Para evitar estas especulaciones, esta entidad lo compraba todo y después se lo vendía a las fábricas. Estaba como intervenido”, nos explica el experto.
A principios de los años 70, el silo se amplía. Duplica prácticamente su tamaño. Esta ampliación se nota en la estructura del edificio si echamos un vistazo desde cerca, en tierras de Villalón de Campos.
“La ubicación era perfecta. Lo construyeron, con mucho acierto, cerca de la estación de tren. Se puso una vía férrea para que los vagones cogiesen y descargasen el silo. Era la zona mejor ubicada, cerca de la Carreteras de Palencia, pegando a esa estación”, nos explica Rufino. Una ubicación que miraba y velaba por la rapidez a la hora de almacenar y transportar el cereal y el trigo desde el pueblo vallisoletano hasta su destino. “Cargaban el cereal y lo llevaban hasta Villada, donde estaba la Estación del Norte. Había trasiego a la hora de cargar todo el trigo”, añade.
El edificio protagonista de estas líneas desarrolló esta labor hasta casi los años 90 y, en la actualidad, no tenía ninguna utilidad. “Es una torre que nos recordaba, simplemente, que ahí estaba”.
Un edificio de 38 metros de altura que era “de suma importancia” para “los pueblos limítrofes que hasta allí llevaban el cereal”. “Los agricultores estaban contentos porque llevaban el trigo al silo y cobraban el mismo día”, apunta Rufino.
A la venta
Ahora, el Fondo Español de Garantía Agraria (FEGA), dependiente del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA), lo ha puesto a la venta, a un precio de 193.665,84 euros. Junto a otros 21 silos de nuestra Comunidad.
“Aquí, en Villalón, la gente no piensa que el silo tenga mucha utilidad. Se habla de que lo puede comprar alguna Cooperativa. El único significado que le damos aquí, ahora mismo, es por su altura. Es la torre que vigila el pueblo. Lo ves, a lo lejos, y muestra un trocito de nuestra historia. Da nostalgia ver el silo porque hace años había muchos obreros allí trabajando. Era un centro industrial. Fue una pérdida desde que dejó de funcionar allá por los años 90”, añade nuestro entrevistado.
Villalón de Campos conserva su encanto patrimonial con iglesias y monumentos que quitan el sentido. El silo, con una gran historia detrás, como hemos podido apreciar, está ya a la venta.