Al banquillo un conocido del clan de los Monchines por pasar heroína

El próximo martes, 22 de noviembre, la Audiencia de Valladolid ha fijado el juicio contra Francisco G.D., un conocido e histórico miembro del clan de los Monchines nacido en el año 1959 y que fue condenado ya como autor de un delito de tráfico de drogas a la pena de nueve años y seis meses de prisión por una sentencia dictada por la sección segunda de la Audiencia Provincial de Valladolid el pasado 17 de julio de 2008.

El acusado extinguió la pena el día 1 de junio de 2012 mientras que el escrito de acusación señala que Francisco G.D. se ha dedicado, desde al menos el mes de mayo de 2022 a la venta de sustancias estupefacientes. Ventas que se realizaban en las inmediaciones de los domicilios ubicados en la Avenida de Palencia y la calle Doctor Ochoa de Valladolid.

El escrito de acusación señala que el día 10 de mayo de 2022, sobre las 12.25, el acusado fue a la calle Prado de la Magdalena para contactar con J.M.V. quien dio un billete de 20 euros al acusado entregándole éste a cambio un pequeño envoltorio que contenía 0,36 gramos de heroína.

Unos días más tarde, el 27 de mayo de 2022, sobre las 18.00 horas, Francisco G.D. se dirigió en un vehículo hasta el Paseo del Cauce para entregar a otra persona un pequeño envoltorio que contenía 0,14 gamos netos de heroína.

Mientras que el 20 de junio de 2022, sobre las 15.40 horas, el acusado entregó a otra persona cinco envoltorios que contenían  0,68 gramos netos de heroína y 0,43 gramos netos de cocaína.

El escrito de acusación cuenta que el 7 de julio de 2022 se produjo el registro de la vivienda del acusado y que éste entregó, voluntariamente, 930 euros y dos envoltorios que contenían heroína de 0,5 y 0,6 gramos. En el dormitorio principal se encontró una caja de zapatos con 28.850 euros y un envoltorio de heroína de 0,2 gramos brutos de peso y en el salón una contaba con una libreta en la que aparecían anotaciones manuscritas con nombres y cantidades.

En un segundo registro, el 7 de julio de 2022, en la vivienda del acusado situada en la calle Doctor Ochoa, Francisco G.D. entregó de forma voluntaria otro paquete envuelto en plástico con 146,52 gramos netos de heroína con una riqueza del 57,18% y en la cocina se encontraron en una lata de Haribo dos envoltorios envueltos en papel de aluminio con 158,53 gramos netos de resina de cannabis, y más drogas.

El escrito de acusación asegura que el acusado pretendía destinar dichas sustancias al tráfico a terceros y que la sustancia intervenida alcanzaría, en el mercado clandestino, un valor aproximado de 34.197,98 euros. Asegura que los hechos relatados son constitutivos de un delito contra la salud pública y pide seis años de prisión con inhabilitación especial para el derecho de sufragio pasivo durante el tiempo de la condena y multa de 90.000 euros, con responsabilidad personal subsidiaria en caso de impago de un día de privación de libertad por cada 100 euros impagados.